“Lo asistí cuando quedó tirado ahí, en el suelo. Fui con mis hijos después de los balazos, llamamos a los gritos al 911 para que vengan a asistirlo porque él decía ‘estoy herido, estoy herido’. Salió la señora de él y nos alcanzó una toalla para hacerle presión en las balas”.
La descripción pertenece a la primera vecina que asistió a Ángel López, el policía retirado de la Policía Federal que fue asesinado el miércoles cerca de la medianoche cuando regresaba a su casa sobre la calle Castelli, casi esquina Acha, tras comprar cigarrillos, caso del que informó ampliamente Primer Plano Online en su edición de ayer.
“Primero llegó un patrullero con dos femeninas y no les dije nada porque no lo iban a poder levantar. Pero luego vino el móvil con dos masculinos, a uno de ellos lo zamarreé y le dije que se estaba muriendo, que hagan algo. Lo cargaron en la camioneta y se lo llevaron al hospital de Morón”, indicó la testigo.
Como se sabe, el jubilado recibió tres impactos de bala de los 15 en total que se dispararon en la escena durante el enfrentamiento con los cuatro delincuentes, de los cuales dos ya fueron sobreseídos del crimen por tener 15 años.
La jueza de Responsabilidad Penal Juvenil Cecilia Drago ordenó su traslado a un instituto de máxima seguridad, mientras el otro menor que intervino en el hecho, de 16 años, se encuentra detenido recuperándose en el hospital Balestrini.
Al cuarto sujeto que participó del ataque también le dictaron la orden de detención. Se trata de Ezequiel César Adorno (21), quien tiene sobre sus espaldas la peor de las imputaciones, dado que la expectativa de pena es perpetua. Está acusado de robo agravado por el empleo de arma de fuego en grado de tentativa (porque a la víctima no alcanzaron a robarle), portación ilegal de arma de fuego de uso civil y homicidio criminis causae agravado por la participación de menores.
“Ángel era una excelente persona, siempre disponible si necesitábamos algo. Yo crecí en este barrio y tengo una enorme impotencia por ver cómo lo dejaron morir, porque la ambulancia jamás vino cuando la tenemos acá cerquita. Bronca además porque ellos (los delincuentes) tienen derecho a matarnos y nosotros no podemos hacer nada”, lamentó la vecina, que también contó la anécdota de cuando estaba en la comisaría 1ª de Morón y los padres de los menores de 15 años fueron a reclamar “indignados” que les entreguen a sus hijos.
INFORME Quién era el policía de la Federal asesinado en Morón: se había jubilado en 2010
La mujer también contó que el policía asesinado “vació el cargador” para defenderse del intento de robo. Ayer se dieron cita en la esquina de Castelli y Acha, a diez metros de donde sucedió el hecho. López vivía sobre la calle Castelli junto a su esposa Lidia y ambos eran padres de Verónica, también oficial de la Policía de la Ciudad.
Hoy viernes las familias de la zona anuncian otra movilización hacia Don Bosco y Agüero (punto límite de Morón y La Matanza), para reclamar justicia por Ángel y reclamar por mayor seguridad en la zona.