Un grupo de ONGs proteccionistas de animales controlarán la peregrinación a Luján que se hace a caballo promovida por centros tradicionalistas de distintos puntos del territorio bonaerense. Lo que buscan es que cada uno de los equinos que participan estén en condiciones, que se puedan hidratar como corresponde y cuenten con su sanidad al día.
Las postas se armarán desde el próximo miércoles 24 de septiembre y estarán las 24 horas hasta el 28, día del regreso. En cada una de esas paradas revisarán a los caballos y controlarán su condición general con veterinarios, con colaboración de las áreas de Tránsito de los Municipios.

Los puestos de control se ubicarán en Morón, Ituzaingó, Merlo, Moreno, General Rodríguez y Luján. “Nuestra función es ser un manto de piedad para esos animales que son llevados por varios kilómetros para cumplir promesas hechas por personas”, reflexionó Carina Tordente, organización Caballos de Zona Oeste y una de las promotoras de la iniciativa.
Para poder instrumentar esos exhaustivos controles también cuentan con otras entidades vinculadas al proteccionismo como Rescatistas Unidos de Zona Oeste (RUZO); Voluntarios por los Caballos (VPC); Sos Can; Equus; Jaulas Vacías y Proteccionismo Independiente. También participan especialistas de la Policía Rural y de Bomberos de cada distrito.
Controles declarados de interés municipal
La tarea de las ONGs proteccionistas fue declarada de interés municipal y un aporte clave para la salud animal. Tordente lo graficó con datos contundentes: “en 2013 llegamos a encontrar más de 20 equinos en la vía pública agonizando. El año pasado hubo uno solo”, describió. En rigor, la clave es desalentar no la peregrinación, sino que se haga a caballo y sí se realice a bordo de rodados sin tracción de animales.


En caso de haber alguno en estado deplorable o con condiciones que ponen en peligro su vida automáticamente quedan secuestrados y son derivados a lugares preparados para su rehabilitación. Incluso las organizaciones cuentan con espacios con veterinaria las 24 horas. Además, para quien pasa por allí a bordo de un caballo o de un carro tirado por un animal el control es obligatorio. Este año, los peregrinos podrán ingresar a la zona de la Basílica de Luján solo a caballo, no con carros o carruajes.
La peregrinación de zona oeste parte de Liniers y termina en Luján por Ruta 7
“En 2024 marcamos precedentes porque no dejamos que continúen los carros con ruedas debido a que la tracción a sangre en la mayoría de los Municipios está prohibida”, precisó Tordente. Ahí radica el mayor argumento para incautar los equinos en caso de que se detecten irregularidades.
Y remató: “esto se tiene que terminar. No pueden llevar por tantos kilómetros a un animal, que no se puede quejar ni reclamar por sus derechos. Esto debería cambiar de una vez y que la gente que quiera ir lo haga en vehículos apropiados, no como en la época colonial. Que no expongan a los caballos a semejante sacrificio”.
