Los laboratorios nacionales y multinacionales decidieron rescindir el contrato con PAMI y no les venderán más medicamentos a los abuelos al menos hasta que haya una renegociación del vínculo con el organismo nacional. A partir de esta decisión, el PAMi convocó a una reunión de urgencia para el próximo martes, en la que buscará llegar a un acuerdo para que no se suspenda el suministro a jubilados y pensionados en las farmacias de todo el país.
Ocurre que el acuerdo fue firmado en febrero pasado con un dólar a 18 pesos y una inflación proyectada en el 15 por ciento anual, cifras ambas que quedaron completamente desfasadas con el descalabro económico del año. La explosión del dólar en los últimos días supone el incremento de los insumos y los medicaemntos, que ya comienzan a llegar a las góndolas de las farmacias con valores indexados.
En la notificación entregada al titular del PAMI, Sergio Cassinotti -a la que tuvo acceso Primer Plano Online- firmada por los apoderados de las cámaras CILFA y COPERALA que nuclean a los laboratorios, expresan que «el actual escenario de desequilibrios macoreconómicos ha modificado sustancialmente las condiciones previstas al momento de suscribir los términos acordados en el mes de marzo del corriente año, tornándolos excesivamente gravosos y claramente apartados del riesgo asumido por nuestra parte, y provocndo un grave desequilibrio en las obligaciones asumidas en el convenio PAMI-Industria».
En principio, la reunión del próximo martes determinará cómo sigue el acuerdo. Las farmacias continuarán vendiendo normalmente los medicametos a los afiliados del PAMI hasta el 31 de octubre. Fuentes de la industria farmacéutica consultadas por Primer Plano Online adelantaron que será una negociación muy compleja ya que «no sólo hablaremos de la actualización de los valores, sino también de los plazos de pago a las farmacias que en la actualidad exceden los 90 días».