Aldana llegó con sus cuatro hijos a dejar a un amigo de uno de ellos en su casa, ubicada en Salala al 500 en Lomas del Mirador. El nene bajó, entró a su casa y, cuando la familia estaba próxima a seguir con su vuelta al hogar, tres delincuentes aparecieron corriendo en la escena y apuntaron contra todos.
“Nos bajamos tan rápido como pudimos. No opusimos resistencia ni nada. Y por suerte mi amiga escuchó y nos abrió la puerta para darnos refugio. Al rato los vecinos nos tocaron el timbre para avisarnos que la camioneta estaba encendida y ahí me di cuenta que no se la llevaron”, contó la mujer en diálogo con Primer Plano Online.
La VW Tiguan que conducía la víctima estaba en marcha y lo único a lo que atinó la mujer fue a poner el freno de mano cuando la apuntaron. No está claro si los ladrones no supieron quitarlo o si no tenían idea del manejo de un vehículo con cambios automáticos. Como sea, no se la pudieron llevar.
Los hijos de Aldana, de 26, 15, 10 y 8 años, lógico que entraron en pánico frente a la situación y la única preocupación de su mamá era que no les hagan nada. Violentos y armados, los jóvenes ladrones igual se alcanzaron a robar pertenencias de la mujer, como la cartera con toda su documentación personal, además de ropa y dinero en efectivo que tenía.
“Ya sufrimos otros robos, no fue el primero. Por suerte estaban despiertos y pudieron bajar rápido. Pero ellos viven con miedo”, completó Aldana, que finalmente terminó agradeciendo al destino que no le hayan disparado a nadie. “En un momento pensé que iban a gatillar por bronca de no poder irse con la camioneta, pero no, se fueron corriendo”, concluyó.