Se filtró en las últimas horas un video que podría dar un vuelco a la investigación que se le sigue al músico Elián Valenzuela, conocido popularmente como L-Gante, y que tiene detenido al artista desde el martes pasado por disposición de la justicia.
En las imágenes, que el defensor del músico, Alejandro Cipolla, pidió incorporar como prueba al expediente, se observa que el denunciante sube al auto por sus propios medios, es decir, en principio desbarata la teoría del secuestro.
“Solicitamos se introduzca en la causa el siguiente video captado a través de las redes sociales dónde se puede visualizar a G.T. (el denunciante) ingresando en el vehículo automotor que luego sale a toda velocidad”, indica el escrito, que se completa con el pedido para que declare la hija -menor de edad- del sujeto que ingresa al coche.
EL VIDEO PRESENTADO COMO PRUEBA EN EL EXPEDIENTE
La causa que mantiene detenido a L-Gante se inició luego de un hecho ocurrido el 27 de mayo pasado, cuando G.T. recibiera un llamado en su celular de parte del músico con la amenaza de que iba a ir a buscarlo a su casa para matarlo a él y a toda su familia.
Luego de ello, siempre en el barrio Bicentenario de General Rodríguez, el cantante llegó al lugar a bordo de un BMW blanco cuyo dominio tenía prohibición de circular expedida por el Registro de la Propiedad Automotor Nº 3 de Morón, según consta en la causa, y mediante la utilización de un arma de fuego intimidaron a la víctima a que se suba al rodado.
Luego se dirigieron a la casa de la segunda denunciante, R.C.P., a quien también obligó a subir al vehículo para realizar “un recorrido que se sostuvo por un lapso de aproximadamente veinte minutos, reteniendo a las víctimas contra su voluntad”, según la imputación en contra del cantante. Además, lo acusan de tenencia ilegal de estupefacientes, porque en los allanamientos le encontraron marihuana.
Según la hipótesis de la Fiscalía, el objetivo del secuestro del hombre y de la mujer fue obligar a que G.T. “intercediera en un procedimiento que se estaba llevando a cabo por agentes de la Guardia Urbana de General Rodríguez” -sabiendo que G.T. es agente municipal- para que “dejen ir a los integrantes de su banda musical, ‘La 420’ que estaban siendo requisados” a la salida del boliche ‘Río’ (anteriormente se llamaba Wana).
Las víctimas fueron liberadas en la estación de servicio YPF ubicada en la intersección de avenida España y Bernardo Irigoyen, de General Rodríguez, una vez que L-Gante supo que sus amigos no tenían más problemas con la fuerza de seguridad local. Supuestamente, lo que pasó fue una pelea en el interior del local nocturno que continuó afuera con actos de vandalismo hacia un auto de un amigo del artista y luego el conflicto se trasladó a la casa del barrio Bicentenario, donde vive la mamá del artista, con G.T. a la cabeza.
En su declaración, el músico se defendió sin responder preguntas ante la Fiscalía Nº 9 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, pero explicó que la droga encontrada en su domicilio no le pertenecía y que al regresar a su vivienda se cruzó con G.T., su pareja y sus hijos, que lo insultaron cuando se acercó a dialogar con ellos con su auto.
EL MENSAJE DE L-GANTE A SUS SEGUIDORES
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“Yo sólo quería hablar con G., de macho a macho, esas fueron mis palabras. Yo quiero hablar con vos G., es lo que le decía”, declaró L-Gante. “G. se sube del lado derecho de la parte trasera del BM, a lo que yo subo los vidrios y arranco el auto. Comenzamos a hablar con G., y mis palabras eran preguntarle que fue lo que pasó, necesito que me expliques que pasó”, lo que en principio coincide con las imágenes del video que acaba de conocerse. Después fue a la casa de R.C.P., a la que invitó a subirse al auto para aclarar qué había sucedido, y “ella subió por su propia voluntad”.
“Luego de partir de la casa de R. con G. y ella, paso por mi casa donde estaban todos los patrulleros y mis amigos. Hablo con la Policía, le digo por la ventana -estando G., R. y un pibe que me traje del boliche que me estaba acompañando en el auto- en forma chistosa que el que estaba haciendo quilombo es éste (señalando a G), se rieron y seguimos. Creo yo que si una persona estaba obligada, tranquilamente tuvo la oportunidad de decirle algo a los policías, ya que habíamos frenado ahí”, completó L-Gante a modo de defensa para desmentir la acusación en su contra.
Es más: en su exposición, el músico aclaró que dejó a ambas personas en ese lugar porque había una remisería y hasta les dio cuatro mil pesos para que vuelvan a sus casas luego de “haber aclarado todo” dentro del vehículo. Después, se fue a dormir. En la lectura que hizo Elián ante la justicia, G.T. es el jefe de R.C.P. en el Municipio y amenazó a la mujer a dejarla sin trabajo si no realizaba la denuncia.