Una mujer policía integrante de la Unidad Táctica de Operaciones Inmediatas (UTOI) con base en Moreno se encuentra internada en grave estado tras ser baleada con su propia arma reglamentaria por un delincuente que tenía pedido de captura por homicidio y murió abatido por balas policiales durante un doble enfrentamiento.
La oficial Florencia Herrera recibió un disparo en la ingle y su condición de salud es “crítica”, según definieron fuentes de la investigación a Primer Plano Online. Entre miembros de la fuerza iniciaron una cadena de oración por su salud: a la joven agente le extirparon el útero y sufrió complicaciones en órganos vitales a raíz del balazo. Además, solicitan dadores de sangre.
Según logró reconstruir este medio, todo comenzó en horas de la mañana cuando un llamado al 911 alertó sobre una confrontación vecinal en la proximidad del cruce de Ruta 25 con Ruta 24 en la localidad de Cuartel V. Julio César Morales (35), un hombre con antecedentes penales y que estaba prófugo de la justicia acusado de un crimen en el marco de un ajuste de cuentas narco ocurrido en 2023, fue quien llegó al lugar para iniciar la gresca a punta de pistola.
Al llegar, efectivos policiales lograron reducirlo, separar la reyerta y trasladar a Morales a la Unidad de Pronta Atención (UPA) 12 para su atención, porque presentaba golpes varios y cortes en el cuero cabelludo. Mientras estaba siendo asistido, la Policía descubrió que tenía un arma en su poder y reforzaron su custodia, además de incautarle el revólver.
Los médicos de ese establecimiento decidieron que sea trasladado en ambulancia al hospital Mariano y Luciano de la Vega para realizarle otros estudios y, mientras era llevado, el sujeto se fugó del móvil blanco. “Aprovechó un semáforo, se arrojó de la camioneta del SAME y escapó”, precisó un vocero de la pesquisa.
Desde ese entonces comenzó una búsqueda frenética porque a esa altura ya los policías sabían que habían logrado detener a un prófugo, que luego se les terminó escapando. Así, con el dato de que se manejaba en una Chevrolet Meriva, los efectivos instrumentaron un operativo cerrojo hasta que lograron dar con un vehículo de esas características que se había frenado por inconvenientes mecánicos.
La estaban reparando al costado de la Ruta 25 y un móvil policial lo identificó a él y a dos cómplices que estaban acompañándolo, otro hombre y una mujer. Cuando los policías se acercaron al rodado, entre ellos la herida Herrera, los acompañantes del sospechoso se abalanzaron sobre el personal policial y a la oficial le alcanzaron a robar su arma reglamentaria, con la que luego Morales siguió su fuga disparando contra los uniformados.
Luego el sujeto se escondió en una vivienda de la zona y continuó su ataque contra los oficiales. Fue en ese instante en que la mujer policía recibió el disparo en la ingle que la hirió de gravedad. Mientras eso ocurrió, sus compañeros lo rodearon y gatillaron contra el prófugo, que recién dejó la pistola cuando cayó muerto.
El caso es investigado por el fiscal Federico Soñora, de la UFI Nº 4 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, que no adoptó ningún temperamento con el personal policial. Las pericias, en tanto, quedaron a cargo de Gendarmería Nacional.
