Era la madrugada y los dueños de casa sintieron ruidos poco habituales. Suele haber movimientos nocturnos en el patio de un domicilio en el que conviven patos y gallinas, entre otros animales. Y un conejo negro con pintitas marrones, protagonista involuntario de esta historia.
Es que luego de romper el cerco perimetral que divide interior y exterior de la finca, dos delincuentes lograron acceder a la propiedad y tomar con sus manos a la mascota, a la que escondieron entre sus ropas. Luego, rápidamente salieron para seguir su travesía nocturna.

¿Qué iban a hacer con el conejo? Nadie lo sabe y poco importa, porque en rigor lo habían obtenido mediante un ilícito que fue visto por la pareja dueña de la casa. De inmediato, la víctima llamó al 911 para advertir de la situación y un móvil de la Policía Local de Hurlingham se acercó hasta la zona.
Animal recuperado y devuelto a la familia
Los dos sospechosos de haber cometido el robo fueron sencillamente ubicados por los efectivos luego de los datos aportados por la propietaria de la casa intrusada. Efectivamente, el personal policial interceptó a los sujetos a escasos 150 metros de la casa.
Uno de ellos tenía entre sus manos al conejo, que fue recuperado por la Policía y devuelto a su familia. Los sujetos identificados en el hecho fueron identificados como S.U.C. y M.J.H., quienes quedaron a disposición del fiscal Claudio Oviedo, de la UFI N° 5 de Morón, bajo cargos por robo simple en grado de tentativa.
Uno de ellos recuperó su libertad y el otro quedó detenido por contar con antecedentes penales. Y lo más importante: el conejo fue rescatado de las garras delictivas y devuelto a su familia.









