Un teniente primero de la Policía bonaerense mató a uno de los dos motochorros que intentó asaltarlo mientras circulaba con su hija. El hecho ocurrió en General Rodríguez y la justicia dispuso que el agente continúe en libertad al considerar que actuó en legítima defensa.
Fuentes de la investigación informaron a Primer Plano Online que todo se desencadenó sobre la calle Rivadavia, entre colectora sur y Defensa de las Malvinas del mencionado distrito. Por allí circulaba de civil en la madrugada del domingo el efectivo, de 45 años e integrante del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) de Merlo.
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— Primer Plano (@primerplanotv) January 20, 2025
La víctima transitaba la mencionada arteria con su moto Yamaha New Cripton cuando detectó que dos sujetos lo encerraron y se abalanzaron contra él y su hija. En una maniobra por intentar esquivarlos, cayó al asfalto. En esas circunstancias observó que uno de los malvivientes se acercó hasta la joven “con un objeto en la mano que presumió era un arma”, indicaron los voceros. Fue por eso que extrajo su pistola reglamentaria de la cintura y disparó para evitar que le hagan daño a la chica.
El agresor corrió unos metros hasta llegar a colectora y cayó desvanecido. Cuando el oficial dio aviso al 911 y solicitó la presencia de patrulleros y del SAME, cuyo médico constató su deceso. Las fuentes precisaron que se trataba de Germán Ezequiel Giuliano (18), quien al lado de su cuerpo tenía un elemento mecánico que resultó ser un saca bujías, no un arma de fuego.
Los antecedentes penales del fallecido y el robo previo al enfrentamiento con el policía
El fallecido tenía heridas de arma de fuego en espalda y en tórax y registraba antecedentes penales por varios hechos. Uno de ellos siendo menor en Ituzaingó e incluso durante el trabajo de peritos se presentó en el lugar otra víctima, a la que el abatido con su cómplice (que escapó) le habían robado minutos antes del tiroteo con el efectivo policial: le sustrajeron una bolsa con fiambre y evitó que le lleven el resto de sus pertenencias por arrojar su morral al interior de una vivienda.
La causa es investigada por la fiscal Gabriela Urrutia, de la UFI Nº 10 del Departamento Judicial Moreno-General Rodríguez, quien instruye actuaciones por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego. Si bien dispuso que el agente permanezca en la seccional policial, durante la tarde del domingo recuperó su libertad.
En principio, si bien todo dependerá del resultado de las pericias, la funcionaria considera que actuó en legítima defensa suya y de su hija. “Imposible determinar en la oscuridad de la noche si era o no un arma la que portaban los atacantes”, describieron las fuentes. Las pericias quedaron a cargo de personal de Gendarmería Nacional y de la Policía Federal.