Una ruidosa protesta en las puertas de los locales de Garbarino en Morón, Merlo y Laferrere paralizó las ventas de esos comercios durante la mañana de hoy. Es a raíz de una manifestación de trabajadores que reclaman por irregularidades en la liquidación de sus salarios y por el pago de un bono de fin de año. Después del ruido causado, la patronal convocó al diálogo y se comprometió a pagar un monto extra de nueve mil pesos ($9.000) para cerrar el 2020.
Érica Zalazar, delegada gremial del Sindicato de Empleados de Comercio de Zona Oeste (SEOCA) de la sucursal Garbarino de Morón, explicó que la medida de fuerza es por “irregularidades salariales que padecen los trabajadores desde hace ocho meses”, cuando la empresa fue vendida a otro propietario.
«Desde entonces venimos padeciendo el pago del sueldo en cuotas, pero de la parte que le corresponde a la patronal, que es un 25 por ciento», precisó. El resto se pagó con los ATP del gobierno. “También hay suspensiones y el aguinaldo fue liquidado con suspensión”, agregó la delegada.
Desde el sindicato también reclaman el pago de un bono de fin de año, pero la patronal se niega a dar la discusión, y por la falta de aportes a las obras sociales. “Los trabajadores no estamos cobrando las asignaciones familiares tampoco. Venimos de perjuicio en perjuicio. Llegamos a la medida de fuerza por cansancio”, completó Zalazar.
Sin embargo, después de la manifestación, recibieron la noticia del pago del bono, que se hará efectivo en tres cuotas iguales. Por supuesto, de inmediato levantaron la medida de fuerza y se pusieron a trabajar de cara a la Navidad.