Tenían el dato de que había regresado a las andanzas luego de varios meses oculto. Lo estaban buscando, pero esperaban el momento justo para dar el golpe y que no se vuelva a escapar, porque además tenía orden de captura nacional e internacional por un crimen.
Cayó Gustavo ‘Rata’ Santillán, uno de los sujetos sindicados como líder y organizador de la venta de drogas en el barrio San Alberto de Ituzaingó, al que en rigor no lo intentaban detener por ese hecho sino por el asesinato de Leandro Ezequiel Brizuela (30).
Aquel episodio ocurrió en la tarde del domingo 18 de agosto de 2024 y se descubrió luego de que la víctima fatal fuera dejada tirada en las puertas del Hospital del Bicentenario con un balazo en la cabeza. Desde un primer momento se sospechó que aquello había sido un ajuste de cuentas y se comprobó que había comenzado en una vivienda de la calle Camerucci al 2100, de la populosa barriada.
Después de dejar a Brizuela herido de gravedad en las puertas del nosocomio, dos hechos más completaron la secuencia: un VW Gol Trend gris incendiado en la intersección de El Delta y Posta de Pardo, y un segundo joven ingresado al hospital Posadas con heridas de bala en ambas piernas. Fue luego de esa tarde de terror que arrancó la pesquisa, a cargo de la fiscal María Alejandra Bonini, de la UFI Descentralizada Nº 2 de Ituzaingó.
La caída del prófugo que “se relajó”
Tras una serie de medidas ordenadas por la justicia, personal de la subDDI de Ituzaingó, a cargo del comisario Juan Pablo Ponte Wisto, siguió los pasos de Santillán. Había un dato concreto: iba de vez en cuando al barrio San Alberto durante un rato y se retiraba hacia Fuerte Apache, en Ciudadela. Una vez que detectaron cuál era el auto en que se movilizaba lo siguieron con cámaras de seguridad del Laboratorio de Imágenes del Municipio para reconstruir el recorrido.
“Fruto de las tareas realizadas se logró determinar que Brizuela (el asesinado) mantenía una disputa de vieja data con Santillán por el manejo de territorio de venta de drogas. Eso culminó con el enfrentamiento armado. Hubo varios allanamientos en busca del imputado, pero no se pudo dar con su paradero”, indicaron fuentes de la investigación consultadas por Primer Plano Online.
A partir de esa información, los investigadores montaron una serie de tareas encubiertas primero para cotejar si era verídica su presencia allí y luego para orquestar su detención, que finalmente se concretó ayer. “Esperaron el momento en que pisó la calle y lo detuvieron. No pudo oponer resistencia, porque además está con una bota en el tobillo derecho”, completaron los voceros.
Santillán ahora enfrenta cargos por homicidio agravado por uso de arma de fuego y tenencia ilegal de estupefacientes para su comercialización. En las próximas horas será indagado y quedará formalmente detenido.
