Hartos de la inseguridad, vecinos de Castelar sur pretendieron hacer justicia por mano propia anoche contra dos delincuentes que, además de robarle a un trabajador que hacía repartos, se metió en una vivienda para escapar de la Policía. Cerca de un centenar de personas se acercó hasta el domicilio de las aprehensiones y se abalanzó sobre los malvivientes: destrozaron un patrullero y dos mujeres policías terminaron con heridas de diversa consideración.
Según logró reconstruir Primer Plano Online, la secuencia delictiva comenzó en Bonifacio y 14 de Julio, donde Carlos Ángel M. (37) entregaba materia prima en la pizzería y hamburguesería ‘El Galpón’. En esas circunstancias fue sorprendido por dos sujetos armados quienes le robaron dinero en efectivo, su teléfono celular y las llaves de su auto.
Tras un llamado al 911, un móvil del Comando de Patrullas se acercó al lugar y los propios vecinos de la cuadra les indicaron a los uniformados el lugar hacia el cual fugaron los ladrones a pie. Así comenzó un operativo cerrojo en la zona, hasta que lograron establecer que se habían metido por los techos en una vivienda de la calle Madrid al 3.700. Es que el dueño de la casa lo había advertido por sus mascotas, que estaban alteradas.
El vecino autorizó a los policías a ingresar a la finca, donde efectivamente, en el patio interno estaban refugiados los delincuentes. Allí los uniformados lograron detener a Manuel Ignacio Caruzo Vera (21) y Fernando Spinelli (36), este último con un arma de réplica tipo pistola en su poder.
El problema se suscitó luego del arresto de ambos dentro de la vivienda. Cuando la Policía pretendió sacarlos para su traslado a la seccional 3ª, cerca de cien personas del barrio se acercaron hasta el lugar con intenciones de hacer justicia por mano propia. Literalmente querían linchar a los sospechosos, e intentaron evitar que el móvil se los lleve del lugar.
Fuentes policiales confirmaron a Primer Plano Online que ese grupo de gente empezó a arrojar piedras contra el patrullero y provocaron la rotura del vidrio de la puerta trasera del lado del conductor y del vidrio delantero del acompañante. Además, por los piedrazos resultó herida la oficial Sandra Montenegro, en su hombro izquierdo, y la agente Lucila Sala con un corte en el cuero cabelludo.
Los delincuentes quedaron detenidos a disposición de la UFIyJ Nº 3 de Morón, que instruye actuaciones por los delitos de robo agravado por el uso de arma de utilería.