Jorge Omar Maggio tenía 55 años y como cada mañana de pandemia se presentó en el depósito de su amigo personal Gastón Sassani. Se había incorporado al reparto de pollos para enfrentar la crisis económica producida por la pandemia de coronavirus, que lo obligó a dejar su actividad de matarife.
Técnicamente era cliente de Sassani: le iba a comprar los productos, los repartía y con eso se ganaba el mango diario. “Era una persona que no tenía problemas con nadie. “La verdad no puedo creer lo que pasó”, definió el dueño de la distribuidora. “Como era Jorge, no me puedo explicar por qué el asesino reaccionó de esa manera”, agregó.
Es que, tal como informó Primer Plano Online ayer, la deuda económica que reclamaba Maggio era de $800, una cifra absolutamente menor como para provocar una reacción que, claro está, ninguna cifra, por millonaria que sea justifica. “Nunca tuvo problemas en dejar mercadería y después pasarla a cobrar”, agregó Sassani.
Qué fue lo que pasó en la carnicería ‘El Vasquito’, es lo que intenta develar el fiscal Oscar Marcos, de la UFI Nº 4 de Morón, a cargo de la investigación. El funcionario espera indagar hoy domingo al asesino, Adrián Gustavo Bustamante (45), que se encuentra en condición de aprehendido, aunque luego de la indagatoria se espera que se convierta en detención.
Maggio era vecino de Ituzaingó y sus restos serán velados en la mañana de este domingo, aunque por el protocolo de coronavirus la ceremonia será íntima y cerrada sólo para sus seres más cercanos. Será en la casa velatoria San Jorge, ubicada en Aristóbulo del Valle 3236, de Merlo, entre las 10 y las 14.