Un motochorro de 17 años fue baleado por efectivo retirado de la Policía bonaerense que resistió un intento de robo en Hurlingham. El malviviente ingresó poco después del hecho al hospital Posadas, donde se encuentra internado en estado reservado tras haber recibido un disparo en el cuello y otro en el estómago.
Según logró reconstruir Primer Plano Online con fuentes de la investigación, el hecho ocurrió en la intersección de Bustamante y Mascagni. En esa esquina los malvivientes intentaron robarle sus pertenencias a una chica que esperaba para cruzar el semáforo cuando justo pasaba por el lugar el teniente jubilado, de 53 años.
Al observar la secuencia, el policía intervino para defender a la mujer y los delincuentes “le apuntaron y dispararon contra su humanidad”, detallaron los voceros. Fue en esas circunstancias que el agente extrajo su arma reglamentaria, de la que tiene portación legal, y disparó contra los atacantes, a los que puso en fuga evitando que concreten su plan delictivo.
Después de ese breve enfrentamiento, los ladrones huyeron y el policía llamó al 911 para dar aviso de lo ocurrido, convencido de que había herido a por lo menos uno de los agresores, cuya vestimenta describió: campera blanca con negro y pantalón oscuro. De milagro con la balacera no resultó herido algún inocente. En su veloz escape a uno de los delincuentes se le cayó una pistola marca Beretta, con la que le dispararon al retirado.
Herido en el hospital Posadas
Una hora después de ese hecho, mientras peritos de Gendarmería realizaban las pericias en el lugar del cruce de disparos, un joven de 17 años -con ropa similar a la descripta por el policía justiciero- ingresó herido al hospital Posadas. “Tenía un disparo en el cuello y otro en el abdomen. Fue operado de urgencia y quedó alojado en terapia intensiva en estado reservado”, precisaron las fuentes.
Con el cotejo de imágenes se logró constatar que se trataba de uno de los frustrados motochorros, cuya identidad ya es conocida en estrados judiciales: tiene varios antecedentes por distintos delitos, incluso siendo no punible.
El fiscal Guillermo Rodríguez Rey, de la UFI de Responsabilidad Penal Juvenil N° 1 de Morón, dispuso la aprehensión y custodia policial del baleado bajo cargos de robo calificado por el uso de arma de fuego en grado de tentativa y portación ilegal de arma de fuego. La investigación sigue: buscan a su cómplice. Para con el personal policial que intervino no adoptó medidas: interpreta que actuó en legítima defensa.
