20 C
Buenos Aires
viernes, marzo 28, 2025
spot_img

Morón le pone punto final a manteros y trapitos: “la calle para los vecinos”

El procedimiento de ordenar la Plaza de la Cultura y sus alrededores se completó esta semana. Sacaron definitivamente a los vendedores callejeros y les impiden a los cuidacoches permanecer en las adyacencias de esa zona céntrica bajo la figura de aplicarles una contravención, que contempla hasta 45 días de cárcel.

El Municipio de Morón tomó definitivamente el control de la calle en la zona de la Plaza de la Cultura. Al reordenamiento del que ya informó Primer Plano Online, con la colocación de juegos y puestos para la venta controlada de diversos productos, ahora se le sumó el complemento de erradicar a los manteros y a los cuidacoches.

“Las veredas ya no están ocupadas. Acá lo que se puso en juego es la figura de la contravención, que contempla hasta 45 días de cárcel para evitar que vuelvan. Es algo diferente al delito, que debe ser tipificado con la intervención de un fiscal. Lo mismo pasa con los trapitos, que no pueden cobrar a un vecino que deja el auto”, precisó Ariel Stella, subsecretario de Seguridad de la comuna.

En diálogo con Primer Plano Online, el funcionario recalcó que la determinación del Gobierno local es “tomar el control de la calle”. “Que no haya más manteros ni cuidacoches. Y vamos por más, no sólo en esa zona. Va a llevar tiempo, pero tiene que ser una acción coordinada con todas las dependencias del Municipio. Sin palos, pero con firmeza: no se puede y no se puede”, enfatizó.

Como graficó este medio a finales de enero durante una recorrida por ese espacio público, el Municipio reorganizó la venta ambulante, que ahora se lleva adelante mediante puestos habilitados con credencial para cada titular en la mitad del lugar.

En la otra parte de la plaza, en tanto, se colocaron juegos para niñas y niños, maceteros y asientos. Además, un sector tipo escenario destinado para eventos culturales. La feria ahora se extiende hasta la mitad de la plaza arrancando en Salta. La otra parte del predio quedó para esparcimiento y para que la salida de la Universidad de Morón permanezca despejada.

La entidad académica, asimismo, colocó rejas en la sede que posee en la intersección de Salta y Machado, donde funciona el Centro de Investigaciones Científicas y de Enseñanza Experimental. Hasta hace algunos días había manteros: la idea con esa estructura de fierro es evitar que vuelvan a instalarse allí.

De trapitos y manteros: la decisión política que tomó Morón

En la charla con este medio, Stella reveló que “hubo manteros a los que se les ofreció trabajo y no quisieron aceptar”, y reconoció también algo que era vox populi: cuidacoches que amenazaban a la hora de dejar el rodado y exigían sumas fijas de dinero a cambio. “Acá, el objetivo y la decisión política es la calle para los vecinos. Y con una máxima: dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”, manifestó el funcionario.

Según pudo saber este medio, está prevista la apertura de nuevos comercios en la zona y la Universidad de Morón, asimismo, recupera un espacio que le había quedado vedado, por ejemplo, para que sus estudiantes puedan festejar el título cuando finalizan sus carreras. “Hoy en la plaza de la Cultura hay gente tomando mates. Antes había paqueros (personas que consumen Paco, una de las drogas más destructivas)”, concluyó Stella.

Una rápida recorrida de Primer Plano Online por distintos centros comerciales de Morón confirman que los trapitos no fueron erradicados en su totalidad. De hecho, anoche mismo hubo mensajes a la redacción de gente que se quejó porque sobre la calle Carlos Casares, en Castelar, a partir de las 20 se juntan varios trapitos en la zona gastronómica.

En todos los casos exigen un pago a quienes se acercan hasta los bares o restoranes de la zona. La queja es que los controles deberían ser más estrictos en esos horarios, mucha más ahora en verano, en donde la concentración de público es mayor.

Lo más visto

Artículos destacados

¿Lo leíste?

spot_img
spot_img
spot_img
spot_img
spot_img