El conflicto de fondo entre la Universidad Nacional de Moreno (UNM) y el Municipio suma nuevos capítulos. Ahora, con el protagonismo que decidieron tomar mamás que forman parte de la comunidad educativa de la Escuela Secundaria Politécnica (ESPUNM).
Como es sabido, ese colegio pertenece a la entidad académica, que tenía entre sus planes la construcción de un nuevo edificio para multiplicar exponencialmente su matrícula y pasar de 288 estudiantes que tiene en la actualidad a 1800 que podría albergar.
Sin embargo, ese proyecto quedó postergado por el increíble litigio que enfrenta a las autoridades de ambas instituciones: la Universidad, por un lado, y la Municipalidad, por el otro. En medio, la justicia federal de San Martín, que habilitó el inicio de la obra solicitado por el Gobierno de la intendenta, Mariel Fernández, para avanzar en la edificación del Polo Educativo de Moreno, que incluye, entre otras cosas, el nuevo Consejo Escolar local.
“Esto es algo que nosotros venimos atravesando hace tres años desde que recibimos la primera faja de clausura en el predio que en este momento está en litigio. Hubo un montón de instancias y de situaciones complicadas: Los chicos vivieron un montón de atropellos”, refirió Natalia Ciciaro, una de las madres de estudiantes de la ESPUNM.
En una entrevista con Adrián Noriega y Norman Díaz en la emisión del programa periodístico Primer Plano por canal 7 de Flow, la mujer describió que “lo que necesitan los chicos en este momento es el espacio que es el espacio que a ellos les corresponde”. Cabe señalar que la escuela actualmente funciona con aulas modulares y allí se dictan dos modalidades de Secundaria en jornada simple.
El reclamo de la comunidad educativa ESPUNM a la intendenta Mariel Fernández
El proyecto del nuevo edificio en el predio en litigio estaba pensado, inicialmente, para dictar allí cuatro modalidades de ese nivel educativo y albergar a 1800 estudiantes. Hoy en día cursan allí chicas y chicos de primero, segundo, tercero y cuarto año, y en el ciclo lectivo 2025 no tienen lugar físico para recibir a quienes ingresan.
“Yo estoy por cumplir 40 años, soy de Moreno, me eduqué en Moreno y lamentablemente la educación es muy mala. En vez de mejorarla está empeorando y realmente lo que nosotros necesitamos es que nos den una respuesta, una solución”, se quejó Vanesa Bustos, otra de las madres convocadas por el ciclo periodístico.
La mujer apuntó directamente a la intendenta Mariel Fernández, a quien le solicitó que “se ocupe de lo que tiene que hacer”. “¿Qué es más importante? ¿Un Consejo Escolar o la educación para nuestros hijos?”, se preguntó la mamá, molesta porque en las últimas movilizaciones que realizaron como comunidad educativa la única interlocución que encontraron fue un vallado policial.
Mientras la falta de diálogo entre las partes no se modifica y el Municipio avanza con la obra mientras la universidad sigue aguardando algún pronunciamiento judicial sobre un hecho que ya será consumado, porque los ladrillos se van apilando unos sobre otros, hay otro actor que entró en la disputa.
Se trata de La Libertad Avanza, cuyo referente local, Ramón ‘Nene’ Vera se metió en el diferendo entre ambas instituciones y anticipó que estudiará e investigará con las autoridades de la Agencia de Administración de Bienes del Estado (AABE) a quién le pertenece la titularidad del terreno en conflicto. Y si la razón la tiene la UNM, entonces ese organismo solicitará inmediatamente la paralización de la obra.
La decisión de la justicia en marzo de 2023
Como informó Primer Plano Online, mientras la Universidad de Moreno asegura que las tierras en donde se va a construir en futuro Consejo Escolar le pertenecen, la Municipalidad dice lo mismo, con una venia del Gobierno provincial.
Ese guiño de la administración bonaerense permitió que en marzo de 2023 la Cámara Federal de San Martín y rechace la medida cautelar impulsada por la entidad académica y, si bien no resolvió la cuestión de fondo, consideró que la documentación presentada por el Municipio acredita que la propiedad del predio le pertenece.
Entre los varios argumentos esgrimidos, el tribunal de alzada puso de relieve que el Ejecutivo Municipal “jamás abandonó la posesión del predio” en litigio, y fundamentó su decisión en con un repaso de cómo se sucedieron los hechos desde 2010 a la fecha con la cantidad de elementos incorporados al expediente.
Los jueces Néstor Barral y Alberto Lugones, de la Sala 2 de la Cámara Federal de San Martín, de todos modos insistieron en que “resulta imperioso exhortar nuevamente a las partes intervinientes a generar espacios de diálogo y tomar medidas de acción positiva”, cosa que parece imposible en un contexto de denuncias cruzadas.
En síntesis, para la justicia ambas partes se asumen propietarias del terreno y lo que se debe discutir es la cuestión de fondo (es decir, la titularidad). Mientras, no importa que alguna obra se realice porque es el Estado (la Municipalidad o la Universidad) la que reciba el edificio, que servirá para un bien público.
