Con 221 expositores en total, la audiencia pública para debatir el nuevo Código de Ordenamiento Urbano (COU) en Hurlingham cambió de sede.
En rigor, inicialmente estaba prevista su realización en el recinto del Concejo Deliberante, que no tiene capacidad para más de 50 asistentes. Por lo tanto, el presidente del cuerpo, Miguel Quintero, contó con la aceptación de todos los bloques políticos para trasladarla al Centro Cultural Leopoldo Marechal, ubicado en avenida Vergara 2396 de Villa Tesei.
Como informó Primer Plano Online, la instancia se llevará a cabo el próximo martes 25 de noviembre desde las 10. En el nuevo destino, el espacio físico para albergar concurrencia es de aproximadamente 600 personas.
Asimismo, ya está publicada la totalidad de los inscriptos para dar su opinión en torno al proyecto. Son 4 disertantes propuestos por el Gobierno local para explicar la iniciativa y 217 del público, ya sean vecinos que irán individualmente como representantes de entidades intermedias.
Cómo es el mecanismo de la audiencia pública
Entre quienes se anotaron para ser parte de la audiencia pública están el exintendente Juan Zabaleta, quien asumirá su banca como concejal el próximo 10 de diciembre, y los ediles también electos Micaela Navill (Somos Hurlingham) y Rafael De Francesco (La Libertad Avanza).
Cada expositor contará con 5 minutos para dar su opinión y será por orden: ya tiene un número asignado y, si al momento de ser convocado para hablar no está presente, habrá perdido su oportunidad de disertar. Si se presentan todos los anotados hay prevista una audiencia pública de más de 20 horas.
EL LISTADO COMPLETO DE ORADORES
El Municipio somete a debate su proyecto de COU que busca convertir en la herramienta medular para el futuro de la ciudad. Según explicó el propio intendente, Damián Selci, la legislación considera tres aspectos centrales, a los que definió como “fronteras industriales, respeto por la identidad de los barrios y el desarrollo de nuevos centros comerciales”.
Entre otras cuestiones, las edificaciones que se autoricen tendrán como máximo 25 metros de altura; en lo que hace a las fronteras industriales instará a habilitar industrias que generen empleo pero en las márgenes, no en el interior de los barrios; y el capítulo referido al desarrollo de zonas comerciales, la búsqueda está centrada en ampliar las adyacencias a estaciones de tren.
