En medio del dolor que todavía enluta a la familia, Elizabeth decidió salir a hablar. Ella es la mamá de Mara Vázquez (19), una de las víctimas fatales del siniestro vial ocurrido en Agosto pasado cuando la chica regresaba de la costa atlántica con otras tres amigas.
Como se recordará, aquel suceso que enlutó a la comunidad educativa del colegio Inmaculada de Castelar, de donde tres de las jóvenes eran egresadas y la conductora cursaba su último año de estudio, ocurrió a la altura del kilómetro 36 de la Ruta 56 entre General Madariaga y General Conesa, en cercanías del puente Las Rosas.
Como consecuencia del impacto, del que está confirmado no participó ningún otro vehículo ni tampoco hubo animales involucrados sino que se trató de un error humano, además de Mara también falleció en el acto Melina Adorno y resultaron heridas la conductora, Catalina Vaccarezza, y la otra ocupante del rodado, Luna Valerga.
La última novedad del expediente en trámite, en manos del fiscal Walter Mércuri, determinó la velocidad a la que circulaba el Peugeot 208 en una recta, como fue el tramo del siniestro. Según la pericia oficial se trasladaba a 139 kilómetros por hora, mientras que en base al perito de parte puesto por las familias Vázquez y Adorno el resultado fue mayor: 143,42 kilómetros por hora. Claramente había un exceso.
“Lo que no puedo entender es qué hizo la conductora para perder el control del auto y volcar. Ella (Vaccarezza) todavía no declaró ante la justicia y lo más increíble es que se fue del hospital de Madariaga cuatro días después del hecho con el codo quebrado y su licencia de conducir. Y es el día de hoy que sigue conduciendo como si nada hubiera pasado”, lamentó Elizabeth en conversación con Primer Plano Online.
Además de la irreparable pérdida de su hija, la mujer se siente vulnerada porque diez días después del crimen vial de Mara “ella (por Catalina) seguía manejando y sacándose selfies al volante”. Es más: cuatro días después del entierro de Mara, Vaccarezza le mandó un mensaje a Elizabeth. “Querían venir a verme. Y le dije que no estaba en condiciones de recibir a nadie pero que más adelante no había problemas. Desde entonces nunca más se comunicó”, señaló.
Recién para los primeros días de marzo la conductora tiene fecha para declarar ante el fiscal, que analizará sus dichos para saber si modifica la imputación de doble homicidio culposo agravado y lesiones graves. “Yo quiero que vaya a la justicia y diga la verdad de lo que pasó y qué provocó semejante vuelco, que terminó con el auto en el otro lado de la banquina y desplazado por más de 25 metros”, agregó la mamá de una de las víctimas fatales.
“Mi única bandera en vida es saber qué hizo para provocar semejante siniestro. Y después seguir adelante para tratar de que cambien las leyes viales, que siempre favorecen a las personas imputadas y dejan en desamparo a las víctimas”, recalcó Elizabeth, quien a diferencia de la actitud de la conductora sí pudo conversar con Luna Valerga, la otra sobreviviente pero que tiene heridas psicológicas tan profundas que le hicieron bloquear los recuerdos de ese instante.
LA SONRISA DE MARA
‘Maru’, como la siguen llamando en el seno familiar que no acepta su ausencia, era la menor de una hermana de 33 años y de un hermano de 28. “Yo soy la preferida de todos”, decía cada vez que alguien osaba decirle algo que no fue lo que ella quería. Y aprovechando su chispa de juventud, en donde tenía todo por descubrir en la vida.
“Su partida fue muy injusta. Le arrebataron la vida por un descuido”, la evoca Elizabeth, quien también subraya que su hija “era la que nos hacía bromas a todos”, por la que abrieron una cuenta de Instagram (@justiciapormaru) en donde suben videos con sus picardías, chistes y sonrisas. “Era la Campanita de la alegría en casa”, cuenta mamá, ya con lágrimas.
Sus sobrinos la llamabas ‘tía Lalu’, porque no les salía el ‘Maru’ y estudiaba arquitectura: estaba en primer año de la carrera. “Quiero recordarla con esa sonrisa constante que tenía, que nada me la podrá borrar, y con lo comprometida que era con todo lo que encaraba”, cerró Elizabeth, quien tiene como leyenda en su WhatsApp la frase “hoy falta un día menos para abrazarte”.