“Mi hija tenía 15 años y me avisó que tenía que hablar conmigo. Yo estaba en el trabajo y, ni bien llegué, me contó que un profesor en la escuela le palpó la cola con un libro. Y me aclaró que fue ‘hace ocho o nueve meses atrás’, y que en ese momento se lo había contado a dos personas del instituto, que no hicieron nada”.
Así comienza el relato de la mamá de una de las víctimas de situaciones que espera que la justicia tome cartas en el asunto. No es la única: hay otras adolescentes a las que les sacaron fotos de sus redes sociales (del perfil Mejores Amigos, con lo cual no son públicas) y que distribuyeron en un grupo de WhatsApp entre docentes y militares. Eran imágenes conseguidas por un chico del colegio que las compartía: las jóvenes posaban en ropa interior y algunas hasta desnudas.
Esta situación, a partir del abuso con el libro, se destapó en septiembre de 2022 en el Centro de Instrucción de Aeronavegantes y Técnicos Aeronáuticos (CIATA), un establecimiento secundario perteneciente a la Base Aérea de Morón y que históricamente se conoció como Instituto Nacional de Aviación Civil (INAC). Desde entonces lo que hay es una serie de marchas y contramarchas, de sugerencias de parte de las autoridades del establecimiento a la madre de la menor para que la cambie de escuela. Así por lo menos lo interpreta la mujer, que habló telefónicamente con Primer Plano Online.
Dos datos de esa charla: son varios los nombres involucrados, que ella menciona con precisión. Otro: si bien su hija se lo contó a ella el episodio “entre ocho y nueve meses después de ocurrido (por lo cual se infiere que pudo haber sido en diciembre de 2021), hubo una chica con la que la víctima habló en el momento y que la acompañó, para contenerla, a exponer su relato ante la directiva del colegio. La joven víctima fue escuchada pero curiosamente la mamá de la chica nunca fue informada de lo sucedido.
La mamá de la adolescente recuerda que eso fue uno viernes de septiembre de 2022 y que, al volver a casa, su hija le contó toda la situación y la charla con el equipo directivo. Al lunes siguiente, lógico, la madre fue a CIATA a pedir las explicaciones de rigor. Esa charla de la mamá de la víctima con uno de los responsables del instituto quedó registrada en un acta-volante. A todo esto, la nena tocada no la pasaban bien en la escuela: se sentía señalada por compañeros, compañeras y hasta por algunos docentes.
Al otro día la mujer volvió a ser convocada al colegio, aunque con una exigencia: presentar el acta del día anterior para destruirla “porque sino vamos todos presos”. Esas palabras las pronunció el comodoro Carlos Zarazo González, director del establecimiento por entonces, según afirmó a este medio la mamá de la víctima. Ella cumplió con entregar el acta, aunque igual se quedó con una prueba que luego se incorporó en la denuncia judicial.
Y en una nueva reunión, las autoridades escolares le remarcaron que “la culpa de que mi hija no hable con claridad de los hechos es mía por el trato que yo le doy”. Es otras palabras, sintió que la culparon de la situación. Y esbozaron una frase que aún le resuena: “en definitiva, tu hija nunca quiso venir a esta escuela”: una insinuación a que la cambie de colegio.
Con la destrucción del acta, el comodoro radicó la denuncia en la Fiscalía Nº 8 de Morón, que estaba de turno ese día, y la víctima declaró en cámara Gesell. Pero en estos días pasó algo por demás incómodo para la joven estudiante: se presentó en la escuela, en donde siente que sigue siendo víctima de una mirada discriminatoria, y se encontró con el docente que la tocó, que ya no dicta clases en el lugar, pero por algún motivo había asistido.
La chica está actualmente en tratamiento psicológico. Y se cree discriminada por cosas como llevarse una materia y que tenga que rendir en febrero directamente, sin pasar por la mesa de diciembre como otros compañeros o compañeras. ¿Se la quieren sacar de encima en la escuela? Es lo que infiere su mamá-
En la justicia le informaron a la madre que no pueden meterse en temas pedagógicos, que eso depende de la Dirección General de Cultura y Educación provincial por más que sea un colegio de la Fuerza Aérea.