Un escándalo de proporciones se vivió a lo largo de esta semana en un jardín de infantes de Morón, cuya comunidad educativa hizo saber a Primer Plano Online de la situación que atravesó luego de que un bebé apareció con un cebo para ratas en su mano. Autoridades del Municipio estuvieron en contacto con padres y madres, se reunieron en dos oportunidades, la última muy subida de tono, y el resultado fue el desplazamiento preventivo de la cúpula directiva del establecimiento a cargo del área maternal.
El caso sucedió en el Jardín Municipal Nº 1 de Morón ‘Alfredo Palacios’, que pertenece a la órbita local. Está ubicado en Morón centro norte, sobre la calle Sarmiento al 1200, frente a la vieja sede del club Matreros, y es una institución que goza de un buen prestigio en general, que fue ganado a lo largo de su historia. Se trata de un complejo educativo con educación maternal y jardín de infantes, al que asisten nenes y nenas desde los 45 días hasta los cinco años.
Como sus fondos son linderos con las vías del ferrocarril Sarmiento, hábitat natural para ratas y otro tipo de roedores, las autoridades están en permanente alerta. Hay, además, un trabajo de monitoreo del área de Zoonosis del Municipio, que una vez por mes desarrollan un trabajo de desratización y desinfección en el lugar. Pero esta vez algo salió y uno de los productos usados para eliminar a las ratas terminó en manos de una criatura.
La comunidad educativa en general, lo que incluye a padres, madres, docentes, auxiliares y cocineras, manifestaron su “indignación” en conversación con Primer Plano Online. Y exigieron que las autoridades tomen cartas en el asunto cuanto antes. Es más: recordaron el antecedente reciente de septiembre, donde se suspendieron las clases por tres días en maternal por el mismo problema: roedores y desratización. Pero nunca se había dado una situación semejante, que obviamente despierta pánico.
En diálogo con este medio, María José Peteira, secretaria de Educación y Cultura de Morón, confirmó la determinación de desplazar transitoriamente a las autoridades del jardín mientras se sustancia la investigación sobre lo ocurrido. Se trata de la directora y la vicedirectora, responsables de la sala de lactarios, a la que pertenece el bebé que tenía el cebo. En rigor, lo que intentan averiguar es porqué ese chiquito se encontraba en un lugar al que jamás debió haber accedido. Y también la comunidad educativa afirma que desde el jardín buscaron minimizar lo que pasó.
“No hay motivos para minimizar la seriedad del asunto. Es importante aclarar que el cebo tiene es un anticoagulante para los roedores. De todos modos, se ha generado un protocolo nuevo y vamos a aumentar las medidas de seguridad, atando los cebos, por ejemplo, y haciendo un mapa para detectar en dónde estarán colocados”, explicó la secretaria.
La funcionaria participó de las reuniones que hubo a lo largo de la semana, de la que también fueron parte personal de Zoonosis del Municipio y funcionarios y funcionarias del área de Salud también con papás y mamás. “El cebo no estaba húmedo, con lo cual no lo había llevado a la boca el nene. El chiquito no debió haber estado ahí. Y lo que transmitimos a las familias son las garantías de que eso no se va a repetir”, completó Peteira.
Según el testimonio de algunos padres y madres que se comunicaron con la redacción de Primer Plano Online, al menos una vez al mes se realiza el trabajo de desinfección, que está a cargo del área de Zoonosis del Municipio. Lo que piden es que se realice con mayor frecuencia para evitar la presencia de roedores en el jardín y que los controles tengan otro tipo de rigor para que no se repita algo como un bebé tocando algo que no corresponde.
Valeria Gómez Villa, directora de Educación del Municipio, consignó por su parte que se modificaron, en acuerdo con la comunidad del establecimiento, los recaudos para el control interno. Ella fue una de las participantes de la reunión que se hizo ayer viernes, en medio de un clima hostil, en donde quedó en claro el enojo de papás y mamás. “Les informamos de los cambios que realizamos para llevar tranquilidad”, detalló.
La funcionaria asistió junto al director de Zoonosis del gobierno comunal y su par de Epidemiología. Si bien fueron a poner la cara la escucha se hizo muy difícil por el enojo reinante. De todos modos, luego de la suspensión transitoria, las autoridades confirmaron que el lunes se retoman las clases en el jardín, que tendrá nuevas personas a cargo mientras se investiga como un cebo para ratas terminó en manos de un bebé.