En medio de un control vehicular de rutina a la altura del kilómetro 21 del Camino del Buen Ayre, en Ituzaingó, personal de la Policía Vial bonaerense terminó incautando casi tres kilos de marihuana lista para su comercialización que era transportada en un auto que, supuestamente, era en rigor de una aplicación de viajes.
Lo pintoresco de la situación es que, para la realización del procedimiento que constate el secuestro de la sustancia, los efectivos terminaron recurriendo al pesaje en una heladería de la zona.
En base a la reconstrucción de los hechos realizada por Primer Plano Online con fuentes de la investigación, los tres sospechosos fueron frenados por la Policía para la revisión de la documentación del rodado sobre la mencionada arteria.
Pero como la cédula verde aparentaba ser apócrifa, y el conductor al ser preguntado sobre el vehículo entró en contradicción y manifestó un cierto nerviosismo, entonces los uniformados armaron un operativo de urgencia a su alrededor.
“La versión que brindó es que era un auto que había alquilado por la plataforma Marketplace para ser como una especie de remis y que la persona que iba en el asiento trasero era el pasajero, mientras que se acompañante iba un amigo suyo. Entonces los agentes lo invitaron a trasladarse hasta la comisaría más cercana para corroborar los datos del coche y, en esas circunstancias, el hombre que estaba sentado atrás se dio a la fuga corriendo”, precisó una fuente de la pesquisa consultada por este medio.
En ese momento la Policía advirtió que algo delicado había en ese auto y convocó a testigos para revisar el rodado y las pertenencias de los dos sujetos a bordo. Entonces encontraron la sustancia en una bolsa, que aparentaba ser marihuana pero que lógicamente debía ser corroborado. Y, como se trataba de una comitiva destinada al control de documentación, no tenían manera de constatar cual era la cantidad para registrar el procedimiento.

“Cuando notificaron al Juzgado Federal de turno, la indicación que recibieron los policías fue la de pesar el cargamento para tener una noción inicial y que quede escrito en el acta. Como no tenían a mano, se dirigieron a la heladería Grido, que está ahí a pocos metros, y terminaron pesando la droga en la balanza comercial del negocio, siempre con los testigos cotejando todo”, agregó el vocero.
El peso total de lo incautado fueron dos kilos 750 gramos, que ya está en poder de la jueza Alicia Vence, a cargo del Juzgado Federal Nº 3 de Morón, y de la Secretaría Nº 9, cuya responsable es Mariana Sioli.
Los dos ocupantes del auto, identificados como Matías Alejandro Soto (conductor) y su acompañante Juan Cruz Díaz, quedaron detenidos e incomunicados a la espera de ser indagados hoy miércoles.
La justicia ordenó la realización de sendos allanamientos en las viviendas de ambos, en las calles Pedro Zavatarro al 4500 de Caseros, y Triunvirato al 3000, de San Martín, en donde incautaron más elementos que los vinculan al delito de tenencia ilegal de estupefacientes con fines de comercialización, como una balanza de precisión, un arma símil fusil Fal que era de réplica y cuadernos con anotaciones con las operaciones realizadas y por realizar.
Ahora la justicia concentra la investigación en la búsqueda del prófugo, primero intentando determinar quién es, y luego en la ruta de la droga secuestrada, es decir, procedencia y destino. También los acusados enfrentan cargos por la adulteración de documentación pública y encubrimiento.
