El dueño de una joyería ubicada en pleno centro de Morón fue detenido en las últimas horas acusado de ser parte del engranaje de una banda que cometía entraderas y escruches en viviendas de la región oeste, principalmente en Ramos Mejía.
Los procedimientos fueron solicitados por la fiscal Andrea Palín, de la UFI Nº 9 de La Matanza, y la Secretaría Única de Mariano Marcuz, y ordenados por el Juzgado de Garantías Nº 4 de ese Departamento Judicial, cuyo titular es el juez Fernando Pino Guevara. Fueron en total seis los allanamientos concretados por efectivos de la DDI La Matanza, a cargo del comisario mayor Flavio Marino, en domicilios de Rafael Castillo, Virrey del Pino, Ituzaingó y Morón.
Fuentes con acceso al expediente informaron a Primer Plano Online que el origen de la pesquisa fue un violento robo padecido por un hombre de 67 junto a su hija en una vivienda de la calle Lamadrid al 300 en Ramos Mejía. A las víctimas, tras maniatarlas, las despojaron de objetos de valor, celulares y dinero en efectivo: 2 mil dólares y 30 mil pesos.
Fue allí cuando el personal policial inició el seguimiento de la organización delictiva, y a partir de una huella dactilar recopilada en la escena del delito pudieron identificar a uno de los autores, identificado por las fuentes como Jonathan Nehemías Castillo (36), un sujeto con “frondosos antecedentes penales”, detallaron los voceros. Además, pudieron conseguir el teléfono con el que se maneja y así seguir su rastro.
Las detenciones de una banda que reducía sus botines en la joyería de Morón
Sin embargo, Castillo fue detenido pocos días después de esa entradera en otro hecho: en una requisa de urgencia le encontraron un celular robado y quedó tras las rejas acusado de encubrimiento. Cuando realizaron la apertura del equipo en cuestión los investigadores se encontraron con un “festival de evidencias” para constatar la cómo operaba la banda.
“Del análisis de las comunicaciones y el entrecruzamiento de llamadas surgieron dos abonados que, acorde a información exhibida, estaban en el lugar al momento del robo”, agregaron los voceros. Ellos eran, según la información oficial, Alexis Gabriel Segura y Leonardo Miguel Gómez, ambos también con antecedentes penales.
Y lo más importante de la pesquisa: tras la violenta entradera, la banda se dirigió a la joyería Emanuel, ubicada en la avenida Rivadavia al 18200, de Morón, para reducir los productos del ilícito y cambiar los dólares. Además, tenían “frecuentes comunicaciones con el propietario del comercio”, identificado como Carlos Alberto Figueras, alias ‘Charly’, quien además “regentea otros negocios de cambio de divisas ilegal, como así la compra y venta de oro también en el mercado negro”.
Esos comercios vinculados a ‘Charly’ están en la mira de la justicia. “Sospechamos que también allí se realizan operaciones ilegales y la puesta a la venta de productos obtenidos en las entraderas realizadas por la banda. Así que estamos esperando más elementos para profundizar la investigación”, completaron las fuentes consultadas.
Durante el procedimiento en el local los investigadores descubrieron que la joyería tenía una puerta secreta
En concreto, en las últimas horas luego de los allanamientos fueron detenidos Leonardo Gómez (38), Alexis Segura (34) y Carlos Figueras (55). Quedó con captura porque no fue encontrado en la vivienda en que lo fueron a buscar Cristina Cofre (25) y permanece detenido por la otra causa paralela, y ahora se le suma este expediente, el mencionado Jonathan Nehemías Castillo (36).
En principio la organización enfrenta cargos por los delitos de robos agravados en modalidad escruche y entradera. Además, tomó intervención de Justicia Federal de Morón por las operaciones de cambio de moneda. Durante los procedimientos la Policía incautó gran cantidad de dinero en moneda argentina y estadounidense, dos armas de fuego y documentación de interés para el caso.
En la joyería la Policía realizó el allanamiento y secuestró elementos de interés como celulares. Si Figueras es parte de la organización delictiva o un comerciante engañado que compraba artículos para poner a la venta es algo que se intenta determinar.
Por el momento la imputación hacia él es la de encubrimiento agravado por el ánimo de lucro, aunque las comunicaciones con otro de los detenidos pueden ser prueba clave para agravar los cargos en su contra. Además, el negocio por ahora sigue abierto, no fue clausurado.
