Una violenta protesta del gremio ATSA Hurlingham en las puertas del sanatorio San Juan Bautista, ubicado en la localidad de Libertad, en Merlo, derivó en una denuncia judicial realizada por el apoderado del establecimiento sanitario en contra de la organización sindical.
“El humo que generan las gomas (que prenden fuego los manifestantes en las puertas del sanatorio) está ingresando y perjudicando la salud de los pacientes internados. Además, amenazan a los directivos y no dejan entrar ni salir a nadie, ni siquiera a personas que necesitan atención: tienen bloqueada la clínica”, explicó a Primer Plano Online Adrián Biasotti, responsable legal de la empresa de salud.
El directivo también aclaró que la empresa “no debe sueldos ni aguinaldos” al personal y precisó que lo único que está en debate con el sindicato es un aumento del 11,4% que acordó con las cámaras que nuclean a los establecimientos privados de salud.
“Ese acuerdo, para el año 2024, no fue homologado porque es adicional al anterior y nosotros no podemos afrontarlo”, indicó el abogado, que también reveló que el sindicato “tiene mucha banca” en el Ministerio de Trabajo bonaerense por la relación entre D’Andrea y el titular de esa cartera, Walter Correa.
Según refirió el apoderado, desde el organismo provincial los convocaron a una nueva audiencia, en la cual la clínica ofreció abonar el 50% de ese aumento con el sueldo de enero y el resto en 2 cuotas. Eso fue rechazado por ATSA, que exige el pago del 11,4% con la liquidación de enero y las diferencias de octubre, noviembre y diciembre con su correspondiente ajuste en el medio aguinaldo.
La protesta gremial arrancó el lunes, cuando intentaron prender neumáticos sobre la avenida y vecinos lo impidieron. Martes y miércoles volvieron a peticionar en menos cantidad, aunque también de forma ruidosa y con entrega de panfletos. Hoy jueves, en tanto, el reclamo fue mucho más subido de tono, con todas las entradas y salidas bloqueadas.
De hecho, la mano de la ruta 21 que va hacia Pontevedra también estuvo cortada y sólo se acercó personal de Tránsito del Municipio para ordenar el tráfico vehicular en la zona. “En un momento vino un patrullero, conversó con uno de los manifestantes y se retiró. Por eso optamos por radicar la denuncia penal por el daño que están causando en pacientes y trabajadores con esa forma de manifestación”, completó Biasotti.
La presentación recayó en la Fiscalía Nº 4 de Morón.
