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viernes, febrero 7, 2025
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Alerta ambiental: en nuestro país ya hay más de 5000 basurales a cielo abierto

La problemática plantea una realidad muy compleja por la mala gestión de los residuos. Las causales son la falta de recolección en zonas de difícil acceso y el vertido ilegal de empresas e industrias que buscan abaratar costos.

Por Cecilia García (*)

Los basurales a cielo abierto son el resultado de la falta de responsabilidad y de la poca gestión del Estado. Son lugares en los que se disponen residuos sólidos de forma indiscriminada, con la particularidad de que no poseen ningún tipo de control, ni operatorias, ni medidas de protección ambiental y tampoco medidas sanitarias.

Se estima que hay más de dos basurales por municipio en toda la Argentina, y muchos de ellos son formales, es decir que los gobiernos comunales hacen uso de ellos de manera oficial como parte de su gestión de los residuos.

En nuestro país la producción de residuos es preocupante: alrededor de 50.000 toneladas al día, un dato alarmante. Una de las principales causas de este problema es la falta de recolección de residuos en zonas que son de difícil acceso, así como también por el vertido ilegal de muchas empresas e industrias que buscan abaratar sus costos.

Los basurales nacen por la falta de recolección en zonas de difícil acceso y el vertido ilegal de empresas e industras

Los basurales a cielo abierto no reciben ningún tipo de control ni manejo adecuado, lo que conlleva a tener grandes consecuencias sociales y ambientales:

  • No poseen medidas de seguridad: se pueden encontrar todo tipo de residuos, como residuos peligrosos y patogénicos.
  • No cuentan con impermeabilización de suelos: la falta de impermeabilización genera contaminación de las napas freáticas y de los cursos de aguas cercanos.
  • Las poblaciones cercanas son las más afectadas:  son susceptibles de recibir impactos negativos en su salud por la falta de gestión en las instalaciones.
  • Son una fuente de trabajo informal y peligroso: muchos son los trabajadores y trabajadoras que viven de la recuperación informal de los basurales, expuestos a malas condiciones de higiene y a una salida laboral muy precarizada, donde se pone en peligro su salud.
  • Generan emisiones de gases de efecto invernadero: la descomposición de los residuos genera grandes cantidades de gases, como lo es el metano, altamente inflamable, que sumado a las grandes cantidades de plásticos, maderas y papeles da lugar a posibles incendios.
  • Generan una gran contaminación al medio ambiente: la contaminación llega a los suelos, afectando de manera negativa no sólo los cursos de agua, sino también los distintos ecosistemas y sus especies, y altera las condiciones naturales de cada localización.
  • Afecta a la salud humana: innumerables son las enfermedades que se producen en los basurales, la presencia de basura en grandes cantidades es una fuente de propagación de enfermedades e infecciones, por contacto directo con la basura, o de manera indirecta mediante transmisores como moscas, mosquitos, ratas o perros.
  • Asentamientos de viviendas: vecinos que viven en condiciones muy precarias, rodeados de factores contaminantes que afectan su calidad de vida y salud, sin tener acceso a agua potable ni servicio de cloacas.

Es crucial conocer estos aspectos y tomar consciencia, para comprender la importancia de proponer soluciones que den respuestas a esta problemática ambiental,  por un lado para mitigar los impactos ambientales y sociales que se generan y al mismo tiempo gestionar de manera formal el trabajo de los recuperadores urbanos.

(*) Cecilia García es Técnica en Gestión Ambiental

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