Cayó el tercer acusado por el crimen a tiros de Joel Riquelmes en Merlo. Se trata de Leonel Alejandro Sayago, quien fue detenido por personal policial mientras caminaba por una plaza de Luján: la justicia había emitido una orden de detención en su contra luego de acreditar que fue partícipe en el ataque mortal.
Como informó Primer Plano Online, el hecho se registró el domingo pasado poco después de las 20, aunque se había originado media hora antes en una canchita de fútbol en el que uno de los imputados, identificado como Nazareno Oscar Ailan, había peleado mano a mano con la víctima fatal.
Cayó el tercer acusado por el crimen de Joel Riquelmes en Merlo: lo detuvieron en una plaza de Lujánhttps://t.co/XcQAFaAzoo pic.twitter.com/jMqsIzkFvW
— Primer Plano (@primerplanotv) November 27, 2025
“Riquelmes le dio una paliza y lo hizo que se vaya del lugar. Nazareno juró venganza y fue a buscarlo con los otros dos sujetos al rato”, precisó una fuente de la investigación. Entre víctima y ese victimario había una relación familiar: Ailan es novio de la prima de Joel. Lo que no está claro es qué fue lo que dio origen a esa pelea mano a mano entre ambos.
Lo cierto es que Nazareno fue a buscar a Riquelmes y lo cruzó por la calle mientras caminaba rumbo a su casa en la intersección de las calles 25 de Mayo y Ameghino, de Parque San Martín. Los atacantes fueron tres, que frenaron de golpe y descendieron de una Chevrolet Tracker negra. Ahí emboscaron a las víctimas y, además de pegarles, les dispararon a quemarropa.
La emboscada mortal
En esa emboscada Riquelmes recibió un tiro en el abdomen que, horas después, resultó fatal para su organismo: murió en el hospital Eva Perón, a donde había sido internado de urgencia. Junto a él fueron heridos Mario Alberto Rodríguez (balazo en la rodilla) y Rodrigo Emiliano Baltar (tiro en el muslo derecho).
Tras la brutal agresión, los tres sospechosos huyeron a bordo de la camioneta. Y Nazareno se terminó entregando luego de ser interceptado en la vía pública por la familia de las víctimas, que reclamaron justicia desde que se conoció la emboscada. En tanto el segundo imputado había fugado con la Tracker a la localidad de Castelli, a donde una comitiva policial lo detuvo y le secuestró el rodado. Ahora cayó el tercer implicado.
En principio, la acusación que pesa sobre los imputados es la de homicidio calificado por premeditación agravado por el empleo de arma de fuego, uno consumado y los otros dos tentados, además de portación ilegal de arma de fuego de uso civil. El fiscal Claudio Oviedo, titular de la UFI N° 5 de Morón, espera por indagar al último de los detenidos. Para la justicia el hecho está esclarecido.
