Juan Zabaleta, intendente de Hurlingham, fue el primero de los jefes comunales de la región oeste que salió a repudiar públicamente los dichos del expresidente Eduardo Duhalde, quien anoche puso en duda las elecciones del año próximo y manifestó su “convicción” de que habrá un golpe de Estado en la Argentina.
“Hay discusiones que como sociedad ya tenemos completamente cerradas y donde no hay grieta posible. Agitar el fantasma de un golpe de Estado es de una enorme gravedad. Democracia para siempre. Nunca más es nunca más”, expresó el mandatario de Hurlingham.
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Los dichos del también ex gobernador bonaerense cosecharon fuertes críticas desde todo el arco político. Desde el oficialismo, por caso, el ministro de Defensa, Agustín Rossi, señaló que «un golpe de Estado es un escenario imposible» en el país. «Tengo un trato diario con la realidad militar y es imposible que un escenario de estas características tenga lugar en la Argentina de hoy. Hay un fuerte compromiso con la Democracia y con la Constitución Nacional», añadió el funcionario.
Desde la oposición, el diputado provincial de Juntos por el Cambio, Daniel Lipovetzky consideró «muy graves» los dichos de Duhalde y agregó: «Sobre todo porque los dice un expresidente. En la Argentina no hay lugar para golpes de Estado. Si a algún iluminado antidemocrático se le ocurriera intentarlo, ahí estaremos defendiendo la democracia, las instituciones y la celebración de elecciones».
En tanto, el titular de la Coalición Cívica-ARI, Maximiliano Ferraro, calificó de «irresponsable, grave y repudiable lo dicho por el expresidente Duhalde», y afirmó que «entre todos los argentinos debemos estar unidos en la no violencia y defender el imperio de la Constitución Nacional, garantizar la República y la democracia».
Entre otras voces, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, le exigió a Duhalde «explicaciones a toda la sociedad de las intenciones de sus dichos». «Yo le respondo a este señor: hoy 25 de agosto hace 42 años mataron a mi hija Laura; entonces, en honor a ella, le digo que yo doy el cuerpo si llega a haber una mínima intención de un nuevo golpe de Estado», aseveró la dirigente de derechos humanos.
