En los primeros minutos del año, un tremendo choque modificó el clima festivo en pleno centro de Ramos Mejía. Es que el conductor de un Fiat 147, que según testigos conducía borracho, chocó de frente contra un Citroën C3 que estaba estacionado y de milagro no causó un desastre.
Ocurrió sobre la calle Segunda Rivadavia, a la altura de la estación, y todo quedó registrado por cámaras de seguridad particulares, que rápidamente se viralizaron. Lo peor del hecho es que, como se puede observar en la filmación, el irresponsable al volante bajó del auto y se fue caminando del lugar, ante la atónita mirada de los testigos, que se acercaron a auxiliar.