“¿La verdad? De los 135 intendentes, al único con el que tengo un aprecio personal es con Zabaleta. Yo siempre digo que gobernar no es un club de amigos, no es cómo nos llevamos. Hay una relación intendente-ministro, intendente-gobernador, gobernador-ministro. Y eso es independiente de las relaciones personales. Yo con los intendentes, más allá de con alguno en particular, no tengo una relación personal”.
El último cruce fuerte de Sergio Berni fue con el intendente de Hurlingham, Juan Zabaleta. Le saltó a la yugular luego de que, consultado por Adrián Noriega en Primer Plano, el mandatario local le recomendara “que opine menos de política”. Se sabe cuál fue la reacción del funcionario provincial: lo cruzó con dureza, pese a que luego dijo tener un vínculo que va más allá de la gestión.
En un breve video, Primer Plano Online metió en una suerte de licuadora virtual las expresiones del actual ministro, aunque vienen del período en el que fue senador provincial (2015-2019), y se enfrentó abiertamente con la conducción del Partido Justicialista bonaerense. Berni quería, en rigor ese sueño no lo sepultó, ser gobernador, y tuvo picantes dardos contra el presidente de la estructura e intendente de Merlo, Gustavo Menéndez.
“Ha faltado a los principios del peronismo”, le espetó a Menéndez en su propia cara durante un acto en San Nicolás, cuando todavía el justicialismo no tenía ni en carpeta volver al poder. Además, estaba fragmentado en mil pedazos y terminaba de perder la elección legislativa de 2017 ante lo que en ese momento era Cambiemos.
Otro recordado choque público del ministro fue con Osvaldo Cáffaro, mandamás de Zárate, el pueblo en el que vive y que anhela su esposa, la senadora Agustina Propato, pueda gobernar algún día. “Evidentemente en Zárate, si no es un negocio inmobiliario, que es lo único que le interesa al intendente, la salud y la seguridad es lo que menos le interesa. Es una vergüenza como zarateño”, apuntó el ministro. Fue porque se presentó en el Centro de Monitoreo del Municipio tras el asalto que sufrió una vecina y nadie lo atendió.