Vecinos de la calle Guayaquil al 100, entre Tomás Guido y Colón, en Morón, golpearon y lograron detener a la Policía a un joven de 19 años que intentó robarle la camioneta a un hombre que estacionaba su camioneta en la casa. Como consecuencia de la reacción popular, los dos cómplices del ladrón lograron escapar.
https://twitter.com/primerplanotv/status/1398980522668396548
Según logró reconstruir los hechos Primer Plano Online, todo sucedió el jueves pasado por la noche. Allí, la víctima arribaba a la vivienda con un rodado, una Jeep de color blanco, cuando fue abordado por los ladrones. El tema es que detrás suyo circulaba un Peugeot 206 de un amigo del primer conductor.
“Lo pusieron contra la camioneta y le dieron un puntazo con un objeto de fierro que tenía en la mano uno de los atacantes. Le sacaron todas sus pertenencias cuando su amigo empezó a gritar fuerte para pedir ayuda. Ahí salimos todos los vecinos y uno agarró al delincuente, mientras los otros dos escaparon”, contó un habitante de la cuadra a Primer Plano Online. Su identidad, por obvias razones, no será publicada.
La gran sorpresa para la gente es que el sujeto reducido es una persona que vive a pocas cuadras del lugar. Fuentes judiciales confirmaron a este medio que se trata de Maximiliano Mamani, de 19 años, a quien los propios vecinos redujeron tras correrlo hasta Palacios, casi llegando a la exPierrastegui. El sujeto quedó formalmente detenido por pedido de la Fiscalía Nº 6 de Morón, que le imputa el delito de robo con arma, porque el elemento punzante usado se lo considera así. La escala penal comienza en los cinco años, así que va a estar tras las rejas por un buen tiempo.
El tema es que a la víctima le robaron el celular, que es lo que sirve para interpretar el hecho como consumado. Asimismo, es un hecho que forma parte de la flagrancia, es decir, su arresto se produjo al momento del delito, y el sujeto tiene antecedentes por otros casos similares. El hierro con punta lo tenía en su poder.
Además hay una preocupación adicional en el barrio: las amenazas veladas que se empiezan a leer en redes sociales contra las personas que intervinieron para impedir el delitos. «Antichorros de mierda» postearon, como se puede leer en la captura de pantalla.
