“Les pedí a los vecinos que, por favor, cortemos la calle. Que no dejemos circular más gente que no sea del barrio. Porque esto es a cada hora”. Tatiana permanece angustiada, al igual que su hijo y su mamá, la abuela del adolescente, que fue testigo presencial directa de un robo que pudo terminar en tragedia.
Es que el adolescente, que volvía de la escuela con un amigo, fue abordado en la puerta de su casa de la calle Bolívar al 4300, entre San Pedro y Godoy Cruz de La Tablada, partido de La Matanza, y asaltado a punta de pistola por dos motochorros que mantienen en pánico al barrio.
Las víctimas tienen 15 años. Una de ellas, el hijo de Tatiana, asiste a la Escuela Nº 13 de Lomas del Mirador, distante a 15 cuadras del lugar del ataque. “Mi hijo ya tendría que haber estado en mi casa a esa hora, pero como le agregaron una hora más de clase volvía a las 18.40. Y de repente apareció una moto, con dos personas, con casco, armadas, las dos armadas”, contó la vecina a Primer Plano Online.
De los motochorros, uno bajó a punta de pistola -el acompañante, como se ve en el video- y el otro sube a la vereda con el rodado para completar el raid. Les pidieron el celular, el resto de sus pertenencias y les terminaron llevando hasta las zapatillas. Pero tuvieron algo de piedad: les dejaron la mochila con las cosas del colegio.
“Nosotros vivimos justo enfrente de donde pasó esto. Y mi mamá vio todo por la ventana y se desesperó. Empezó a gritar ‘socorro, socorro’ y los ladrones se subieron a la moto y dispararon para mi casa: la bala pegó en una columna. Tengo el agujero en la puerta de mi casa”, narró Tatiana. Efectivamente, en la filmación se observa cómo el joven asaltado se toma la cabeza al escuchar el tiro.
“Todavía estamos temblando. Yo estaba en mi casa, escuché los gritos, reconocí la voz de mi hijo, después el disparo. Y me imaginé lo peor. Después salimos todos los vecinos, llegó la Policía. La verdad es que estamos desesperados y esperamos que alguien haga algo porque ya nuestros hijos no pueden ir ni a la escuela”, cerró la mamá de una de las víctimas.