Son cada vez más las fuerzas de seguridad urbana que incorporan armamento no letal a sus filas. Ahora lo anunciaron la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y el Municipio de Escobar, en donde el intendente peronista Ariel Sujarchuk confirmó la decisión de adquirirlas para el combate contra el delito.
“Es un tipo de armas que no tienen balas tradicionales ni pólvora y se llaman Byrna. Voy a asumir el riesgo de dotar de estos armamentos a nuestra fuerza de seguridad para proteger a mis vecinos. Son armas de venta libre y que servirán a nuestra guardia urbana», anticipó el jefe comunal al sitio MDZ online.
En tanto, desde la semana pasada agentes de la Policía de la Ciudad salen a vigilar las calles portando nuevas armas de letalidad reducida y que permiten desactivar una amenaza a 20 metros de distancia. De esta manera, los uniformados ya cuentan con este tipo de pistolas junto a las Taser para intervenir en situaciones de conflictividad.
Las nuevas armas son de color naranja y funcionan a base de dióxido de carbono, que les permite lanzar proyectiles cinéticos totalmente sólidos, químicos u orgánicos, como balines que al impacto se fragmentan y liberan una sustancia parecida al gas pimienta. Tienen la finalidad de incapacitar momentáneamente o disuadir a una persona que pone en riesgo a sus víctimas, a los policías y a sí misma.
Una propuesta de campaña que se gestó en Ituzaingó
El libertario Hugo Equiza, ex candidato a intendente por La Libertad Avanza en ese distrito, tenía el año pasado en su agenta de propuestas crear una Fuerza de Vigilancia Urbana para reforzar la seguridad en el distrito, a la que podrán incorporarse, previa capacitación, beneficiarios y beneficiarias de planes sociales.
“Es un personal que va a estar preparado para lo que es tareas de primeros auxilios, en caso de que haya un siniestro en la vía pública, y a su vez realizar tareas de prevención, disuasión, vigilancia y contención en hechos delictivos”, definió el referente de Javier Milei a nivel local durante una entrevista con Adrián Noriega en la emisión semanal de programa periodístico Primer Plano por el canal Somos, de Flow.
Equiza desplegó parte de la propuesta con un joven portando la vestimenta que tendría la fuerza, con pantalón y camisa verse similar a los que porta la Gendarmería y chaleco refractario amarillo. Lo novedoso, además, es que esos agentes tendrían que portar pistolas no letales Byrna, que son “superiores a las Taser”, definió el dirigente.
“Es una lanzadera traumática que tira una munición, que son diferentes tipos, que se utilizan para reducir o solucionar diferentes tipos de situaciones”, sintetizó. “Es un arma de venta libre. Cualquier persona mayor de 18 años va y la compra. O sea, no requiere ningún tipo de credencial especial, una licencia de legítimo usuario, ni nada que se le parezca”, graficó.
Características de las armas Byrna
–Permiten disparos indirectos (techo, paredes, pisos, vehículos) desplegando el compuesto químico para incapacitar al agresor sin necesidad de impactar en su cuerpo.
–Maximizan la distancia operativa hasta 20 metros con gran precisión. Esto le permite al personal que está actuando alejarse de la amenaza y neutralizarla sin exponerse innecesariamente.
-El sistema permite el uso de diferentes tipos de proyectiles según cada situación.
-Como los proyectiles son de tipo orgánicos/químicos, producen una nube de compuesto de entre 1m/1,5m que incapacitan temporalmente a quien está provocando una situación peligrosa. Esto provoca el cierre involuntario de los ojos, fuerte ardor en la piel, generación de mucosa en exceso, lo que le da al personal de las Fuerzas una ventaja para reducir al objetivo.
