Información exclusiva de Primer Plano Online: se acaba de entregar Nicolás Jaime, el tatuador de Merlo que el sábado por la noche baleó a traición y de manera irracional a Damián Ignacio Di Bella, el muchacho de 23 años que pelea por su vida en el hospital Eva Perón de ese distrito.
El sujeto está acusado de los delitos de homicidio en grado de tentativa con alevosía y portación ilegal de arma de guerra. Sin escapatoria, y con una fuerte presión de la justicia y de la propia familia en pos de encontrarlo, el asesino en potencia se presentó ante la Policía para ponerse a derecho. “Ya no tengo dónde ir”, dijo ante un investigador en la subcomisaría del barrio Matera.
En rigor, la revelación del caso hecha por este medio el domingo y la repercusión que tuvo en días sucesivos, con una manifestación que realizaron esta tarde sus allegados en las puertas de la comisaría 4ª de Libertad. Damián pelea por su vida mientras enfrenta un cuadro gravísimo: en el brutal hecho el atacante le disparó 14 balazos y uno de los proyectiles impactó en la nuca, por lo que debieron amputarle parte de la médula.
Según explicó su hermana Victoria a Primer Plano Online esta tarde, Damián había ido con su auto a encontrarse con una chica «con la que estuvo hablando para verse en una plaza del barrio Matera». El novio de la joven se enteró y fue hasta el lugar armado y con una moto para esperarlo.
«Mi hermano estaba llegando al lugar y empezó a recibir impactos de balas. Arrancó el auto y empezó una persecución para matarlo: 14 balas recibió el auto y uno a él en la nuca», describió. «El hdp que quiso matar a mi hermano es un enfermo. La propia novia terminó cagada a piñas por este enfermo y denunciado la misma noche», completó.
Lo cierto es que ahora Jaime está detenido y lo esperan varios años en prisión, mientras Damián está conectado a un respirador. La causa es investigada por el fiscal Claudio Oviedo, de la UFI Nº 5 de Morón.