Un joven de 22 años cuya identidad no será publicada amenazó durante tres horas con arrojarse de un puente peatonal a la altura del kilómetro 40 de la Autopista del Oeste en Moreno.
El muchacho trepó hasta la parte superior de la malla metálica que envuelve a la estructura de hormigón y manifestó en reiteradas ocasiones que tenía la decisión tomada de arrojarse al vacío.
Sin dar precisiones, adujo problemas personales, familiares y laborales y se negó a conversar con los servicios de emergencia. Lo cierto es que, luego de una extensa negociación, que incluyó a personal policial, de Bomberos de Moreno y de la Secretarías de Salud (una psicóloga) y de Derechos Humanos y Justicia de Moreno el individuo terminó deponiendo su actitud.
Si bien estaba trepado a la altura del carril rápido rumbo a Capital Federal, para desplegar el operativo salvataje los especialistas debieron cortar ambas manos de la traza de la autopista, lo que provocó un verdadero caos vehicular. De hecho, justo debajo de donde se había sentado el sujeto los bomberos habían armado un colchón inflable.