Debido a una serie de actos vandálicos recientes, registrados en el tendido de vías, Trenes Argentinos presentó una denuncia penal ante la justicia federal con el objetivo de preservar la seguridad de los pasajeros y pasajeras, y del personal que viaja a bordo de los ferrocarriles.
Según describió la operadora estatal, el último 24 de abril, a las 18.29, en el kilómetro 109, en proximidades de la localidad bonaerense de Gándara, el conductor del tren 306 con destino a Plaza Constitución, se vio obligado a accionar el freno de emergencia, puesto que divisó sobre uno de los rieles, una cubierta de auto con piedras en su interior. Si bien eso es difícil que provoque un descarrilamiento, seguro obliga a frenar el tren y causa demoras en el servicio y hasta roturas en caso de no evitar la colisión.
Este acontecimiento se suma al relevamiento realizado en la estación Domselaar, el 24 de marzo, en el cual se detectó el robo de seis eclisas utilizadas para la unión de rieles y la falta de elementos de sujeción en el enlace de las mismas, circunstancia por la cual, también, se presentó la correspondiente denuncia penal a la justicia. Eso sí es causal de descarrilamiento. De hecho, sucedió el mes pasado con un tren de cargas en Santa Fe.
En ambas presentaciones se solicitó determinar de manera urgente los autores materiales e intelectuales de estos delitos, como así también que se adopten todas las medidas necesarias para evitar este tipo de ataques al transporte público de pasajeros. Y la duda que subyace es si se trata de un sabotaje al sistema ferroviario o si son delincuentes comunes que robar los fierros para comercializar.