Serios incidentes se produjeron anoche en las cabeceras de Once y en Castelar donde están las oficinas de Trenes Argentinos, la Operadora Ferroviaria del Estado que, entre otros ramales, administra la línea urbana de pasajeros Sarmiento que une Once con Moreno y Moreno con Mercedes, todas localidades de la zona oeste del Gran Buenos Aires.
Como consecuencia del problema de origen, que es eléctrico, hoy no funciona el Sarmiento, lo que provoca serios percances para los usuarios que se enteran al llegar a las respectivas estaciones. “Hoy no habrá servicio por seguridad y hasta que no se repongan todos los cables del suministro eléctrico, los que causaron problemas al servicio de trenes con cancelaciones y grandes demoras este viernes y graves incidentes en Castelar y Once con los pasajeros”, señalaron desde la Lista Bordó Nacional.

Los desmanes comenzaron en la estación Once cuando se les comunicó a los pasajeros la discontinuidad del servicio por «problemas eléctricos». No conformes con la respuesta, los usuarios comenzaron a protestar y el malestar fue subiendo de tono. En minutos, destrozaron todos los vidrios de las boleterías de la cabecera principal que la línea tiene frente a Plaza Miserere.
Según informó el sindicalista Rubén ‘Pollo’ Sobrero, el conflicto se originó por problemas en el cableado eléctrico en el puente de Paso del Rey. Al enterarse de la discontinuidad del servicio, los pasajeros atacaron las boleterías de ambas estaciones, la jefatura de tráfico y el servicio médico, indignados por haberse quedado varados. Pero lo peor sucedió en las oficinas que la empresa estatal tiene en el cruce de avenida Rivadavia y Buenos Aires, en Castelar, próximas a la estación. Los usuarios lanzaron una lluvia de piedras contra el edificio administrativo de la empresa Trenes Argentinos, lo que provocó la rotura de todas sus ventanas. Al filo de la medianoche, efectivos de Infantería de la Bonaerense llegaron al lugar y se sumaron a los policías que se encontraban desde horas tempranas.
