En tiempos en que el conflicto con los manteros y los vendedores ambulantes ilegales desapareció del centro del escenario, el intendente de Morón, Ramiro Tagliaferro, decidió tomar otra vez la iniciativa para avanzar en la formalización del circuito pero cambió la estrategia: anunció que convocará a los concejales de la oposición para que sean parte de la solución y, entre todos los actores, hallar una solución final al diferendo.
“El Departamento Ejecutivo continúa estudiando cuál es la política pública que nos termine de resolver un tema que, ustedes podrán ver en la calle, está bastante encausado. Vamos a convocar a los concejales previamente para que también trabajen esa política pública”, indicó el jefe comunal, decidido a cambiar el rumbo tras el revés que le dio el Concejo Deliberante con su idea de reeditar la peatonal Sarmiento. “Me gusta la dinámica de la política desde el punto de vista propositiva, y que la cuestión sea constructiva. Nosotros demostramos que teníamos una propuesta; no se aceptó, vamos por una nueva alternativa”, agregó Tagliaferro.
Respecto de la situación calma que se vive en las calles céntricas del distrito luego de las protestas de fines de julio, el intendente valoró la actitud de los ambulantes que se acogieron a los beneficios que ofreció el municipio. “Yo creo que el gran logro, más allá de la puesta en valor del espacio público, evitar la competencia desleal a los comerciantes que pagan sus impuestos y trabajar sobre la procedencia de la mercadería, es esta cuestión cultural que muchos de ellos han entendido que el Estado está presente y ofrece un camino alternativo que va en línea con la formalización. Lo han tomado, y es una satisfacción”.
Juego clandestino
El intendente de Morón aprovechó también la conferencia de prensa con el ministro de Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro, para referirse a los operativos que realizó el jueves pasado la Policía de la Provincia de Buenos Aires contra el juego clandestino, que desembocó en la detención de Adrián Almaráz, sindicado como “el rey” de esa actividad ilegal.
Al respecto, explicó que el municipio mandó a cerrar con inspectores propios los siete locales de Morón Sur sobre los que pesaba la orden judicial a partir de encontrarse en situación irregular. “Es la misma coherencia que venimos teniendo en un montón de cuestiones. No escondemos los problemas”, enfatizó Tagliaferro, al tiempo que comparó el avance contra el juego clandestino con lo realizado para combatir la venta ilegal ambulante, las picadas y la inversión hidráulica para terminar con las inundaciones. Por último, se despegó del accionar de los efectivos policiales que supuestamente recibían sobornos para permitir el desarrollo del juego. “Esa investigación está en manos de Asuntos Internos”, cerró.