Conmovedor, impactante, milagroso. Cualquiera de los adjetivos que se puedan aplicar a esta recuperación experimentada por Sofía Liria queda pequeño frente al simple hecho de verla. Por eso, el programa periodístico Primer Plano estuvo anoche en su casa de Villa Udaondo, en donde la guerrera que conmovió a toda la comunidad continúa con su recuperación para volver a ser la que era antes del balazo que la codeó con la muerte.
“Cuando pasó fue lo peor que le puede ocurrir a un padre en vida. Recuerdo que veía casos así en la tele y pensaba en cómo estarían esas familias, hasta que de repente me encontré ahí un día. Fue muy duro, pero verla como ella repuntó hasta los médicos dicen que es un milagro”, señaló Gisela Aguirre, la mamá de Sofi. Como contó Primer Plano On Line hace algunas semanas, la jovencita volvió a cursar en la Escuela Nº 27 de Hurlingham y sigue con su tratamiento de rehabilitación en la Clínica Las Araucarias, de Ituzaingó.
Pero no todo es color de rosa para la familia Liria. Porque más allá de la maravilla incomparable que implica tener viva a Sofía, hay un dejo enorme de frustración por el devenir de la investigación judicial para dar con los atacantes, que siguen prófugos a más de cinco meses del robo. “No tenemos noticias, no sabemos nada, nadie sabe dónde están pese a que nos reunimos con la fiscal y con el comisario”, señaló Pablo, el papá de la adolescente. José Saracho y Lucas Gastón Cubilla, ambos mayores de edad, están identificados como los responsables de haber baleado a Sofía luego de robarle el celular en una heladería del barrio.
Para finalizar la entrevista, por primera vez la chica habló en televisión y la audiencia pudo apreciar su estupenda recuperación y sus ganas de conocer la cancha de Boca, a donde fue invitada por el presidente y el plantel del club del que es fanática.
