En un partido sin emociones, Deportivo Morón perdió por 1 a 0 ante Gimnasia y Esgrima de Mendoza en el Nuevo Francisco Urbano. Si alguien esperaba ver a un local algo más distendido después de salvarse definitivamente del descenso, ese pronóstico falló: el ‘Gallo’ volvió a mostrarse como el mismo equipo errático que fue en toda la temporada. Con muy poquito, la visita se llevó los tres puntos para seguir peleando arriba.
El primer tiempo fue un partido sin arcos. Apenas al minuto 15 hubo algo para rescatar, tras un centro de Lautaro Disanto para Matías Romero, que definió por arriba de cabeza. Fue una chance inmejorable para un 9 que otra vez falló, como en casi toda la temporada. Hasta se había sacado de encima la marca y quedó libre ante el arquero.
A los 32 minutos, cuando pasaba muy poco en el juego, el árbitro Juan Pablo Loustau echó a Monasterio, el entrenador local. Fue después de una protesta del orientador ante uno de los pocos avances de la visita. Quedó al mando del equipo Andrés Gaitán, su colaborador más estrecho.
El partido era un espanto, sumado a que había sectores del campo de juego empapado, y varios futbolistas se resbalaban a la hora de intentar dominar el balón. Sumado a las pocas virtudes de ambos equipos, prácticamente no se hicieron daño.
Morón salió dormido al complemento, como regalado. Se tiró atrás y le cedió el campo y la iniciativa al ‘Lobo’ mendocino, que necesitaba los tres puntos para seguir en la pelea por llegar a la final. Así, tras dos yerros defensivos, Bindella quedó en soledad por la izquierda y definió cruzado con un zurdazo que se estrelló contra el caño y se abrazó a la red.
El local intentó torcer el rumbo con los cambios que dispuso, tanto de nombres como de esquema táctico. Pero siguió siendo un equipo anodino, sin capacidad de rebelarse ante la adversidad y se entregó mansamente a la derrota. A los 24 minutos, Recalde le cruzó el cuerpo para impedir el avance de Bracamonte y el árbitro le mostró la doble amarilla.
La mejor chance del ‘Gallo’ para igualar fue a los 26, con un desborde de Curruhinca por la derecha, un centro pinchado que bajó Vitale y Romero, de cabeza, estuvo cerca, pero rechazó Tagliamonte. En el rebote Vitale tampoco pudo en el arquero visitante.
Y a los 43, Bracamonte probó de larga distancia e hizo lucir al golero mendocino. Tagliamonte se estiró, alcanzó a manotear y la pelota reventó el travesaño. Encima, como si fuera poco, ya en tiempo adicional se fue expulsado por una plancha Gastón González, el capitán del local.
Ahí sonó el grito de guerra: “jugadores jugadores, no se lo decimos más, si no ganan el domingo que quilombo se va a armar”, con el que el plantel se retiró del estadio, entre silbidos y abucheos tras otra derrota.
SÍNTESIS:
DEPORTIVO MORÓN: Agustín Rufinetti, Mariano Bracamonte, Brian Machuca, Agustín Gómez y Emilio Lazza; Gastón González, Julián Vitale, Lautaro Disanto e Iván Vaquero; Gonzalo Berterame y Matías Romero. DT: César Monasterio
GIMNASIA (MENDOZA): Matías Tagliamonte; Federico Torres, Diego Mondino, Maximiliano Padilla y Matías Recalde; Nicolás Romano, Ignacio Antonio, Agustín Bindella y Fermín Antonini; Nazareno Solís y Luis Silba. DT: Ezequiel Medrán
GOL: 52’ Agustín Bindella (GIM)
CAMBIOS: 58’ Santiago Sala por Gonzalo Berterame y Agustín Curruhinca por Lautaro Disanto (MOR); 61’ Fernando Barrientos por Brian Machuca (MOR); 73’ Franco Meritello por Nicolás Romano y Aaron Spetale por Luis Silba (GIM); Nicolás Henry por Julián Vitale y Matías Castro por Iván Vaquero (MOR); 79’ Nicolás Rinaldi por Fermín Antonini (GIM); y 85’ Gastón Espósito y Nicolás Gutiérrez por Nazareno Solís y Agustín Bindella (GIM).
EXPULSADOS: 70′ Matías Recalde (GIM) 90′(+4) Gastón González (DEP)
ÁRBITRO: Juan Pablo Loustau
