Seis personas ingresaron en las últimas horas al sistema público de salud de Rosario y de Villa Gobernador Gálvez, en la provincia de Santa Fe, con diferentes dificultades producto del consumo de cocaína. Las autoridades investigan si la sustancia pudo haber estado envenenada o adulterada, tal como sucedió la semana pasada en el Gran Buenos Aires con el saldo de 24 muertes hasta ahora.
Según fuentes oficiales citadas por el sitio Rosario 3, tres de estas personas internadas presentaban cuadros más graves y necesitaban de asistencia respiratoria mecánica. Los otros tres permanecían en observación. La Municipalidad de Rosario, a través de la Secretaría de Salud Pública, confirmó la atención de cuatro pacientes en la guardia del Hospital Roque Sáenz Peña, de la zona sur.
Otra muerte por la cocaína envenenada eleva a 24 el número de víctimas fatales
Por un lado, se trata de dos hombres de 41 y 26 años que presentaron deterioro sensorial depresión respiratoria, explicaron las fuentes, motivo por el cual se les realizaron maniobras de reanimación. Ambos quedaron internados en un principio con asistencia respiratoria mecánica, para ser derivados luego a efectores de mayor complejidad: uno al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) y el otro al sanatorio Los Alerces.
Por otra parte, en el mismo hospital público ingresaron una joven de 22 años y un muchacho de 31, con “un leve deterioro del sensorio” y se encuentran estables y bajo observación en el mismo centro de calle Laprida al 5300. En tanto, un hombre permanecía internado en el hospital Anselmo Gamen de Villa Gobernador Gálvez, por el mismo motivo y con la misma sintomatología. Y en las últimas horas de ayer domingo se sumó un sexto paciente que presentaba el mismo cuadro, que fue ingresado al hospital Italiano de Rosario.
Del interrogatorio a los pacientes surgió como dato en común el reciente consumo de sustancias, por lo que se dieron las actuaciones necesarias a diferentes áreas, al centro de toxicología y al Ministerio de Seguridad de Santa Fe, que inició tareas de investigación para determinar le origen de las drogas y si pudieron estar envenenadas. Dichas averiguaciones quedaron a cargo de la fiscal federal Adriana Saccone y el juez federal Carlos Vera Barros, señalaron fuentes judiciales.
