La querella en el juicio por el secuestro y crimen de Candela Sol Rodríguez, la niña de 11 años asesinada en 2011 en el partido bonaerense de Hurlingham, solicitó esta tarde que los acusados Hugo Bermúdez y Leonardo Jara sean condenados a la pena de prisión perpetua, mientras pidió la absolución del tercer imputado, Fabián Gómez.
El jueves pasado, uno de los fiscales de juicio, Mario Ferrario, pidió al comenzar la ronda de alegatos que se condene a prisión perpetua a Hugo Bermúdez (45) y a Leonardo Jara (37), y a ocho años de cárcel a Fabián Gómez (45). Para el fiscal, los dos primeros acusados fueron coautores de «privación ilegal de la libertad coactiva seguida de muerte» y el tercero fue partícipe secundario del secuestro a la niña.
Otro de los fiscales, Pablo Galarza, dio por acreditado que el 22 de agosto de 2011 Candela «fue sustraída por tres sujetos en una camioneta Ford EcoSport negra» y que estuvo cautiva algunos días en la localidad de San Martín y luego la trasladaron a Villa Tesei. Allí, primero la mantuvieron secuestrada en una vivienda de la calle Kiernan 992, conocida por la prensa como «la casa rosa», durante un breve lapso y después la llevaron a otra propiedad de Cellini 2085 que estaba abandonada. El fiscal aclaró que no iba a pedir al tribunal el cambio de carátula para evitar nulidades, pero remarcó que a su entender quedó probado que hubo un abuso antes del crimen.

Por su parte, el tercer fiscal que interviene en el debate, Antonio Ferreras, dijo que se halló ADN de la nena en un bol y en una taza de la casa Kiernan y de Bermúdez en un palo de madera de la casa de Cellini y dentro de una taza que se encontraba en la vivienda de la exconcubina de Jara, lo que prueba la vinculación entre ambos.