En medio de la congoja por la muerte de Facundo Barreto, la familia del joven camionero asesinado en Hurlingham empieza a encontrar un poco de consuelo a través del accionar de la justicia. Ocurre que hace instantes fue detenido en Fray Bentos, Uruguay, Sandro Fabián Fernández, el hombre que dio muerte al muchacho luego de una discusión de tránsito en William Morris.
Según pudo confirmar Primer Plano On Line, el resultado es fruto de un trabajo articulado entre Interpol Argentina, Interpol Uruguay, la comisaría de William Morris y la Fiscalía 7 de Morón, a cargo de Matías Rapazzo. El prófugo estaba cercado desde hacía un par de días y sólo se esperó el momento exacto para detenerlo. Ahora se inicia el trámite de extradición para poder ser juzgado en nuestro país. Otro aporte decisivo a la causa fue responsabilidad de la Secretaría de Seguridad del Municipio de Hurlingham, que trabajó para que la familia del prófugo entregue datos sobre su paradero a cambio de otorgarle todas las garantías respectivas del debido proceso.
El hecho, por el cual Fernández tenía pedido de captura nacional e internacional, ocurrió el pasado 22 de octubre en Albariños al 2700, entre Los Cerrillos y José de Minoguye, cuando la víctima trataba de estacionar un camión en un garaje.
Según relataron testigos, en ese momento había un auto que obstruia la maniobra y el conductor se bajó para correrlo. Ahí se dio una discusión con Fernández, que estaba festejando su cumpleaños en su domicilio ubicado exactamente a la vuelta del lugar del crimen. El agresor volvió a los pocos minutos y, cuando Barreto estaba cerrando el portón, disparó dos tiros al aire y otros tres al cuerpo de Facundo: una bala impactó en el antebrazo y dos en el pecho, lo que le produjo la muerta a los pocos minutos en el Hospital Güemes, de Haedo, a donde fue trasladado de urgencia.
El abogado de la familia Barreto, Yamil Castro Bianchi, ahora apuntará en la investigación a los cómplices que ayudaron a que Fernández se fugue tras el crimen. Ocurre que el vehículo en el que huyó fue secuestrado por la Policía, y no pertenecía al prófugo sino a un supuesto amigo que estaba en su domicilio en la noche del asesinato.