Un médico especializado en obstetricia de 29 años, quien tenía en su poder seis frascos de ketamina sin la documentación para transportarla, fue detenido en las últimas horas en una plaza pública de Chacarita, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Lo delicado es que, luego de un allanamiento de urgencia en su domicilio, los investigadores descubrieron ocho recipientes más de la misma sustancia alucinógena, utilizada generalmente para la fabricación de drogas sintéticas.
“La droga que portaba no estaba sostenida por ninguna documentación para su transporte, y además tenía en su poder elementos que posee un valor de mercado que ronda en los $ 80.000 aproximadamente, junto a talonarios para recetas médicas sellados y en blanco firmadas por otros médicos”, describió un investigador. En la vivienda también incautaron precursores químicos, elementos de corte y fraccionamiento de drogas ilícitas y medicación variada utilizada para potenciar los efectos de la sustancia.
La Ketamina es una droga disociativa con potencial alucinógeno que es utilizada actualmente en medina por sus propiedades sedantes, analgésicas y sobre todo anestésica, que al ser consumida de manera ilícita “provoca delirio, alucinaciones y pérdida del control del tiempo y de la realidad”, precisó otro vocero de la investigación. En tanto, al ser combinadas con metanfetaminas, incrementa sus efectos y prolonga su duración en el organismo. El tema, no menor, por cierto, es que entre los graves daños que puede provocar en la salud el uso mezclado con otras sustancias puede causar la muerte.
Intervino en el hecho la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas Nº 7 porteña, a cargo del fiscal Matías de Sanctis, quien solicitó la detención del sujeto, remitido en condición de arrestado a la Dirección de Lucha contra el Tráfico y la Venta Ilegal de Drogas. Intervinieron en el procedimientos agentes de la Policía Federal y de la Policía de la Ciudad.
