“Hoy empecé a caminar para la expedición más compleja que enfrenté hasta ahora y para llegar a la cima más difícil de mis 51 años de vida. Tuve la primera de 16 quimios que, si está todo ok y respondo bien, me demandarán seis meses de tratamiento antes de la cirugía”.
Así comenzó la periodista y locutora Silvana Varela su recorrido hacia la cura. Detectó “de casualidad” un bulto extraño debajo de una axila, que le resultó sospechoso, y comenzó a preguntar qué podía ser. Luego de una serie de estudios le confirmaron que se trataba de un cáncer de mama, que ya había hecho metástasis en los ganglios.
“Estaba en un viaje de trabajo en Salta y la mesa del restorán era un poco más alta en la proporción con la silla. Crucé la mano de una forma que jamás lo hago y, sin querer, me toqué un bulto en la axila, como una pelotita. Probé del otro lado, no lo tenía, y rápidamente decidí consultar a una ginecóloga, a la que le debo la mitad de la vida”, contó la reconocida comunicadora de la región oeste en una charla con Adrián Noriega en la emisión semanal del programa periodístico Primer Plano por la señal Somos, de Cablevisión.
Lo curioso es lo que siguió al descubrimiento. Es que ni en la mamografía, ni en la ecografía ni en la resonancia apareció el nódulo, con lo cual Silvana fue “toda contenta” a ver a su médica, pero no recibió la respuesta que esperaba. “Si, pero no. No hay ganglios así porque sí, acá puede haber lo que se llama cáncer oculto. Vamos a seguir buscando”, le detalló. Así fue que en un nuevo estudio lo detectaron.
El tumor que le hallaron a Varela es del tipo no hormonal. Según le informaron, sólo el 15 por ciento de los cáncer de mama es de ese tipo, y surgen después de lo que los profesionales denominan “triple negativo”. Por eso el tipo de tratamiento es más acotado y se aborda con medicación tradicional de quimioterapia. En total, previo a comenzar a recibir los remedios, Silvana tenía tomados siete ganglios.
“Elegí contarlo por dos motivos. El principal, porque creo que mi fuerte es la palabra y, a través de ella, puedo quizá contar una experiencia que ayude a otras mujeres (y hombres, porque atenti, existe el cáncer de mamas en hombres también) y segundo, porque tengo la idea de que, si me lo trago, me come por dentro, así que contarlo es mi manera de visualizar que lo saco de mi cuerpo”, completó la periodista.