La popular parrilla ‘La Casa de Coco’ perdió a su alma mater: Juan Usqueda falleció a los 58 años y quebró para siempre la alegría de los comensales que durante años se sentaron a la barra de su restaurante, ansiosos por saborear una porción de sus exquisitos costillares; vacío; asado de tira; bondiolita; pollo o achuras.
Si bien el local ubicado sobre la colectora norte de la Autopista del Oeste mano a Luján cuenta con un salón comedor donde también se sirven pastas, minutas y postres, el folclore de ‘La parrilla de Coco’ -como se la conoce popularmente- invita a pasar por la barra que suele proponer una larga espera para conseguir un lugar considerado de privilegio. Allí recalan clientes no sólo de la región del oeste, sino que por su estratégica ubicación a la vera de la autopista, los fines de semana recibe comensales provenientes de variados puntos del conurbano y de la Ciudad de Buenos Aires.
En tiempos de pandemia, el popular asador sigue funcionando en versión delivery y retiro en el local, aunque ya sin la magia del legendario Juan, a quien cientos de amantes del buen comer sin dudas van a extrañar.
