Otro de los Municipios en los que se esperaba una mejor performance del Frente de Todos y finalmente no ocurrió fue Moreno. En el primer test electoral que enfrentó Mariel Fernández como intendenta, si bien la boleta del sector fue la más votada no alcanzó el 40% de los sufragios y superó por apenas ocho puntos porcentuales a Juntos.
El oficialismo local cosechó un total de 81.651 votos (38,76%), muy por debajo de los 158.434 que consiguió para ganar en 2019. Si de plebiscitar la gestión se trataba esta elección, el peronismo en Moreno perdió casi la mitad de las adhesiones tras dos años de gobierno.
En cuanto a la oposición, el golpe lo dio el radicalismo, que se impuso en la primaria de Juntos. Allí se impuso Julián Marco Cigna, quien de esta forma se ganó el derecho de encabezar la boleta en noviembre. Venció a las boletas de Leonardo Cópola (Lista A) y de Demian Martínez Naya (Lista B), y entre las tres nóminas sumaron un total de 63.739 (30,26%).
Las otras expresiones políticas que quedaron en carrera para batallar por bancas en el Concejo Deliberante son el Frente de Izquierda y los Trabajadores, que cosechó 16.511 votos (7,83%) y la vencedora en esa PASO fue Lorena Pereira; el Frente Avanza Libertad, con 8491 votos (4,03%); el Frente Vamos con Vos, con 7.114 votos (3,37%); Encuentro Vecinal en Acción, con 4890 votos (2,32%); y Unión Celeste y Blanco, con 4265 votos (2,02%). Si bien todas esas boletas estarán en el cuarto oscuro en la elección general, ninguna con estos guarismos llega a los números (8,33% de los votos positivos) para acceder a bancas en el deliberativo local.
Hay otras dos fuerzas políticas que pugnan voto a voto por poder competir en noviembre. Una es el Partido Republicano Federal, que sacó 3167 votos (1,50%) y la otra es el Frente Patriota, que obtuvo 3148 votos (1,49%). Recién en el recuento final se sabrá si lograron perforar el piso.