El presidente Javier Milei volvió a hacer gala de su dialéctica discursiva durante una disertación que brindó ante el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) en medio de la gira que realiza por los Estados Unidos.
En una exposición que duró poco más de una hora y que se transmitió por su canal de la red social Instagram, el jefe de Estado sufrió algunas interrupciones inesperadas: sonó el teléfono en llamada durante la emisión. Por consiguiente, el vivo se vio interferido por el sonido de la comunicación entrante.
“Sí, está tremendo ese teléfono. Es el mío. Les cuento qué pasa: hemos anunciado que lo íbamos a transmitir por mi canal de Instagram, y siempre hay un imbécil malnacido, porque el que está haciendo esto sabe lo que está haciendo y sabe que está interrumpiendo la charla”, se quejó el Presidente.
“Pero Argentina es así: tiene a un montón de cabeza de termos que hacen este tipo de cosas en algunos casos. Nosotros les decimos cabeza de pulpo. ¿Saben por qué? Porque el pulpo tiene su aparato digestivo en la cabeza, con lo cual la tienen llena de excremento”, graficó.
Milei cerró ese fragmento de su exposición con una sonrisa, pese a lo incómodo que le resultó el momento. “Imagínense que Argentina puede esperar cualquier cosa de esos cabezas de pulpo y no van a parar porque no quieren que se transmita esto”, completó.
Una vez superado el insólito incidente, el Presidente continuó con el desarrollo del modelo económico que implementa en el país. En medio de la bronca por el llamado, recordó incluso el capítulo de los tosedores en el debate presidencial con Sergio Massa antes del balotaje de noviembre de 2023, cuando se impuso y alcanzó la primera magistratura.
