Un joven de 19 años vivió una odisea durante un buen rato cuando fue interceptado por tres delincuentes cuando llegaba a la Pyme familiar de reparación de heladeras. El muchacho, cuya identidad se preserva, se encuentra sano y salvo.
Fuentes judiciales confirmaron lo ocurrido a Primer Plano Online, pese al hermetismo policial. Según detallaron los voceros tribunalicios consultados, el hecho terminó en la avenida Argentina y Joaquín V. González, de Parque San Martín, en Merlo, luego de una persecución que se extendió por 500 metros.
“El joven llegaba al negocio familiar con su camioneta Chevrolet S110 y dos ladrones armados lo interceptaron. La victima empezó a los gritos para alertar al padre y al tío, con quienes trabaja, y eso surtió ese efecto: se lo llevaron en su rodado”, detalló la fuente.
Ese hecho desató una persecución, de la que participaron sus familiares, que terminó con el choque de la camioneta contra un poste a las cinco cuadras y la aprehensión de los asaltantes. Pese a que se lo llevaron esa distancia, para la justicia técnicamente no fue una privación ilegal de la libertad: es que, como nunca los perdieron de vista, no se considera que haya estado cautivo.
Guillermo Damián Mega (29) y Gustavo Adrián Antonacci (47) quedaron detenidos acusados de los delitos de robo agravado por el uso de arma de fuego y portación ilegal de las dos pistolas con la que amenazaron al muchacho. Ayer se negaron a declarar ante la fiscal Adriana Suárez Corripio, de la UFI Nº 8 de Morón, que investiga el caso.
La causa no está cerrada: es que los malvivientes descendieron de una Toyota Hilux, que luego escapó del lugar. Allí estaba parte de la banda, que está siendo buscada.
