Familiares, amigos y vecinos de Martín Galarraga y Juan José Castilla, las víctimas del asesino al volante Alan Rodríguez que provocó las trágicas muertes de ambos el jueves de la semana pasada en la intersección de la Autopista del Oeste y Camino del Buen Ayre cortaron ésta noche la Avenida Vergara y colectora para exigir que la justicia no libere al culpable de la tragedia.
Lo hicieron en medio de escenas de congoja y dolor de los allegados más directos de los fallecidos, que recibieron la solidaridad, más allá del caos de tránsito que se generó en el lugar. Camioneros, motoqueros y automovilistas que pasaron por allí y vieron las consignas se sumaron respetuosamente tocando bocina.
Mientras de fondo se escuchaban cánticos con la consigna “asesino” y “justicia”, la prima de Galarraga, Miriam Arias, le dijo a Primer Plano On Line que “queremos que cambien la carátula de homicidio culposo para que no lo liberen”, mientras que el sobrino del camionero pampeano Juan José Castilla, que vive en Buenos Aires y se sumó a la movilización, expresó que “es un borracho que destruyó a dos familias”.
La manifestación recibió también el acompañamiento de Roberto Escalada, el papá de Máximo, el bebé de un año y medio que murió atropellado en la vereda de su casa por Nicolás Hermosilla. Además de sumarse a la causa de ambas familias llevó su lucha para que el Tribunal de Casación Penal bonaerense ratifique la condena de nueve años contra Nicolás Hermosilla, el asesino que se llevó la vida de su pequeño hijo.
El juez de Morón Jorge Rodríguez tiene que resolver en las próximas horas si le otorga la excarcelación al conductor borracho, que manejaba con el triple de alcohol en sangre que lo permitido y embistió primero a Galarraga y luego al camión conducido por Castilla.
Efectivos de la Policía Bonaerense de Morón y Hurlingham, al igual que personal de tránsito de ambos Municipios estuvieron en el lugar intentando ordenar el tránsito. La marcha se realizó sin ningún tipo de incidentes.