El intendente de la ciudad bonaerense de Brandsen, Oscar Cappelletti, presentó una denuncia penal en una comisaría de esa localidad para que se investigue «si se cumplió el protocolo» de actuación ante el coronavirus en una clínica local en la que el padre y el abuelo del futbolista Walter Montillo murieron por coronavirus.
El jefe comunal afirmó que fue «engañado» al participar de una conferencia en la que, alertó, «no se dijo la verdad». «Estoy decepcionado y con mucha bronca», reveló el jefe comunal de la Unión Cívica Radical, y le pidió a la justicia que investigue el caso. «Fui engañado en mi buena fe por el director de la clínica (Daniel Navarro). Concurrí a una conferencia de prensa, donde no se dijo la verdad, estoy decepcionado y con mucha bronca», dijo el mandatario.
Lo que disparó el escándalo en ese distrito fue la exposición pública realizada por una funeraria contra el centro de salud privado en el que estuvieron internadas ambas víctimas fatales. En concreto, el reclamo público de la casa de sepelios Pourtau fue contra el Instituto Médico de Brandsen, que no le avisó al personal de la casa mortuoria que iba a trasladar a un paciente que falleció el 7 de abril por Covid-19. Es decir, no aplicó el respectivo protocolo de intervención.
«La gente de la clínica dice que los fallecidos tienen la bolsa mortuoria, mientras que las autoridades de la casa velatoria sostienen lo contrario», indicó el intendente. Se trata de los cuerpos del abuelo y el papá de Montillo, reconocido futbolista, actualmente en Chile, pero con pasos por San Lorenzo y Tigre, entre otros equipos.
El Club Atlético Tigre acompaña a Walter Montillo y su familia en este momento difícil.
¡Fuerza Walter! pic.twitter.com/zKEtSygGO0
— Club Atlético Tigre (@catigreoficial) April 8, 2020
El encargado de la funeraria, Gaspar Pourtau, dijo al portal Noticias Brandsen que «en ningún momento nos avisaron del riesgo”. “Mis empleados retiraron a los fallecidos con guantes y barbijos número 95 porque era una muerte natural. En el certificado de defunción pusieron infarto agudo de miocardio», especificó. «La clínica se manejó mal y al tener un caso sospechoso desde el primer día que le hacen el hisopado, tendrían que haber informado a la Dirección de Salud de la Municipalidad y no se cumplió con ese protocolo», precisó.