Una peligrosa banda dedicada a cometer entraderas fue desbaratada en las últimas horas tras una exhaustiva investigación policial y judicial que derivó en dos detenciones.
Uno de los hechos más llamativos de la organización delictiva fue cometido el pasado 2 de septiembre, cuando luego de ingresar a una vivienda ubicada en la calle Argentina al 600, de Ramos Mejía, despojaron al matrimonio propietario de la finca de dinero en efectivo y objetos de valor.
Lo más curioso de ese caso es que luego de cometer la entradera, tal cual se observa en la filmación que ilustra este artículo, los ladrones dieron una vuelta manzana y regresaron a la finca. Uno de los malvivientes ingresó con la llave, que había robado previamente, y exigió a las víctimas que entreguen las claves de los celulares. Después de eso vaciaron hicieron transferencias varias.
Los malvivientes actuaron con una camioneta VW Suran de color oscura, cuyo dominio quedó filmado por cámaras de seguridad públicas y privadas. Sin embargo, los investigadores consiguieron determinar que era apócrifo: la patente había sido robada a otro rodado similar en Villa Luzuriaga. Eso, sin embargo, no fue impedimento para detectar a los malvivientes.
Un evadido de la cárcel y un prófugo de la justicia
Un trabajo realizado por el Gabinete Técnico Operativo de la comisaría de Ramos Mejía reconstruyó el recorrido realizado por los delincuentes, que en principio eran dos: uno al mando del rodado y el otro quien ingresó a la vivienda en busca de las claves telefónicas.
Con esos datos, por ejemplo, cargaron combustible en una estación de servicio de la avenida General Paz, como también se observa en la filmación que es parte de la nota.
La Fiscalía Nº 11 de La Matanza solicitó entonces dos allanamientos para dar con los sospechosos. Uno de ellos sobre la calle Cevallos al 100, en Villa Madero, donde fue detenido Leandro Javier González (33), a quien le incautaron dinero en efectivo (en pesos y dólares), ganzúas, llaves neumáticas para la cortar candados y los celulares de las víctimas. Este sujeto se había escapado de la Unidad Penal 40 de Lomas de Zamora en 2016.
Asimismo, está identificado otro de los participantes de la entradera. Se trata de Alejandro Omar Cardozo (40), cuya huella dactilar fue levantada de la Suran, abandonada días más tarde tras ser detectada por el anillo digital de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En su caso quedó con orden de captura porque no estaba en la vivienda a la que fueron a buscarlo.
