El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, instruyó al Ministerio de Seguridad bonaerense para que despliegue apoyo logístico y profundice la colaboración con las autoridades nacionales y de la provincia de Santa Fe en el marco de la lucha contra el narcotráfico.
En ese sentido, el ministro de Seguridad, Javier Alonso, encabezó ayer viernes el traslado de 80 móviles y tres minibuses, y puso a disposición efectivos especializados y equipos de última tecnología. Según se informó, son vehículos “prácticamente nuevos”, que fueron utilizados en el Operativo Sol del verano en la Costa Atlántica. Es decir, no tuvieron nuevos destinos aún en el conurbano bonaerense.
“Para nosotros hubo un antes y un después de las últimas imágenes y la información que recibimos desde Rosario: venimos a brindar nuestro apoyo ante un problema que impacta y afecta a toda la región”, sostuvo Alonso durante una conferencia de prensa junto al gobernador Maximiliano Pullaro.
Pullaro remarcó que muchas prestatarias no están en condiciones de venderle a Santa Fe la cantidad de patrulleros que requiere la provincia, por eso se comunicó con Kicillof. “Es la primera vez que una provincia colabora con recursos materiales con otra, entendiendo la complejidad y la difícil situación que está atravesando una provincia vecina”, agradeció el mandatario santafecino.
“Hace años señalamos que el narcotráfico es un problema en Santa Fe. Y nos duele en lo más profundo del alma, porque vemos cómo se pierden muchas vidas, y en el caso de la última semana, vidas inocentes, vidas de trabajadores”, explicó el gobernador y añadió: “Ese dolor hizo que los gobernadores nos unamos en esta lucha y que, en este caso, la provincia de Buenos Aires entienda y sienta también la necesidad de ayudarnos”.
Por último, el ministro Alonso señaló: “Lo hacemos también en defensa propia, ya que las principales bandas que desbaratamos en la provincia Buenos Aires tenían vínculos con organizaciones criminales que operan en Santa Fe y otras jurisdicciones”.
“Los delincuentes no reconocen los límites territoriales ni les preguntan a sus víctimas por quién votaron: van a encontrar en nosotros un aliado que está convencido de que debemos trabajar juntos para ponerles un límite”, concluyó.
